—Calma vaquero, no me iré.
—Tenía tiempo de no estar con una mujer, además sino regreso a mi lugar pronto, me llamarán la atención.
—Siendo ese caso, ven métela ya.
Solo me acomodé, el vino se sacó su miembro y sin pensarlo la metió, no era como la de Ramón, pero si daba placer, se movía rápido, yo sabía que de continuar así, terminaría acabando pronto, pero ni modo, no podía arriesgar su trabajo, en eso empiezo a sentir como me llenaba el interior, no tardo nada.
— ¿En serio ya has terminado?
—Como le dije, necesito volver pronto a mi lugar.
—Vete pues, al final quede igual.
Regrese a mi habitación, no podía conciliar el sueño, Kimberly aún no regresaba, al final me he quedado dormida de tanto esperar a Kimberly.
Al día siguiente escuché unos disparos, me desperté asustada al igual que las otras muchachas.
— ¿Que sucede? — decía Alicia.
—No lo sé, pero busquemos como protegernos — fue lo único que supe decir.
Entra Kimberly a la habitación.
—Tranquilas chicas, el tiroteo no es aquí, es en la mansión.
— ¿En la mansión? ¿Que sucede? — pregunto Stefany.
—La policía tiene rodeada la mansión, pero Juan se rehúsa a entregarse y han armado un pequeño campo de batalla.
A pesar que tenía cierto odió hacia Juan al final no podía ocultar que tenía ciertos sentimientos hacia él, me dolió saber que podía salir muerto.
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