Resumo de Capítulo 585 – Uma virada em Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate de Internet
Capítulo 585 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Reencarnación, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.
Alicia sujetaba la barbilla de Marco, vertiendo con fuerza el vino tinto.
Ella habló fríamente: —Si tu boca no está limpia, entonces te ayudaré a lavarla, no necesitas ser cortés conmigo.
Marco, sofocado por el vino tinto, se volvió rojo y no pudo liberarse del agarre de Alicia, sorprendido por la fuerza que había adquirido Alicia. ¿Cuándo se había vuelto tan fuerte?
María, ansiosa al lado, dijo: —Alicia, ¿qué estás haciendo? Deja de hacerlo ya.
Después de haber vertido toda la botella de vino tinto, Alicia finalmente soltó su mano.
Belén mostró una sonrisa al lado, sorprendida por la firme actitud de Alicia.
Marco, libre finalmente, respondió con ira: —Jorge, ¿vas a permitir que Alicia me trate así?
Jorge respondió severamente: —Marco, de hecho, creo que Alicia hizo lo correcto, realmente necesitas lavarte bien la boca.
¿Belén es alguien a quien Marco puede insultar?
¿Es la familia Pérez alguien que ellos puedan ofender?
Marco es simplemente un idiota.
María se dio cuenta de la gravedad del problema, la familia García realmente no puede ofender a Belén, mucho menos a la familia Pérez.
María rápidamente dijo: —Jorge, sabemos que nos equivocamos, Marco también lo hizo por preocuparse por mí, no fue intencional. Después de todo, él también está en una silla de ruedas, ¿cómo podría decir algo tan hiriente?
Jorge, al ver las piernas de Marco, de repente dijo: —Ustedes deben disculparse con la señorita Belén, rápido.
María fue la primera en hablar: —Señorita Belén, hace un momento te hice casi caer, fue mi error. Marco siempre habla sin pensar, creo que no te lo tomarás a mal, ¿verdad?
Después de todo, Marco también es una persona con discapacidad.
Las personas con discapacidad deberían tener empatía hacia otras personas con discapacidad.
Belén sonrió levemente: —Entonces, llevaste mi vestido y además lo ensuciaste, ¿eso se resuelve solo con una disculpa?
Después de todo, Alicia también estaba involucrada en el asunto.
La mirada de Alicia era burlona mientras miraba a Belén: —Supongo que tú también lo viste.
Belén se sintió muy culpable, ya que había malinterpretado a Alicia en el pasado.
Pensaba que Alicia era arrogante y envidiosa porque su hermana adoptiva era más exitosa que ella, así que siempre la complicaba y hasta la maltrataba.
Pero hoy, ella había escuchado todo el proceso del incidente y las difamaciones de la familia García hacia Alicia.
Jorge se puso nervioso de repente, mirando a Belén: —¿Lo viste?
La mirada de Belén era fría, ella se acercó y le dio una bofetada a Jorge: —Sí, lo vi todo, pero nunca imaginé que tú también mentirías, difamando a tu propia hermana menor.
En ese momento, Belén empezó a dudar si Jorge siempre había estado engañándola también.
Después de recibir la bofetada, el ambiente en el cuarto se volvió extremadamente silencioso.
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