Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate romance Capítulo 689

Resumo de Capítulo 689 : Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate

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Alicia vio el mensaje, con una frialdad en la comisura de los labios.

Realmente era muy propio del carácter de Jorge.

Echó un vistazo y respondió: [¡Si destruyes lo que nuestros padres me dejaron, entonces te destruiré a ti! ¡Sabes perfectamente que soy capaz de hacerlo!]

Después de enviar el mensaje, las llamadas de Jorge comenzaron a llegar una tras otra.

Alicia miró la pantalla, pero no contestó.

Belén habló: —Jorge seguramente intentará presionarte de alguna forma, este proyecto también es muy importante para él. Antes escuché a tía Lourdes hablando con él, Jorge ha invertido bastante dinero en esto, y si el proyecto fracasa, su empresa se verá muy afectada.

—Al final, pagará las consecuencias de sus actos.

Alicia ya había tomado una decisión en su corazón: esta vez dejaría pasar a Jorge, y luego lo vería caer con sus propios ojos en otro abismo.

Sara se acercó sonriendo y dijo: —¿Y tú y el señor Roberto? Esa escena en la que vino a salvar a la mujer que ama, fue como sacada de una telenovela.

Belén preguntó con cautela: —¿Sentiste, aunque sea un poquito de emoción?

—Claro que me emocioné, no soy de piedra.

Alicia suspiró: —Pero mi relación con Roberto no es tan simple, entre nosotros no se puede pensar solo en el amor. ¡No podemos vivir siendo tan egoístas!

—En realidad, sigues sintiendo que la relación entre tú y Roberto no es lo suficientemente sólida, por eso tú tampoco estás segura, ¿cierto?

Al escuchar esto, Alicia esbozó una sonrisa amarga: —Puede ser.

Realmente no estaba segura.

Cuando se acostó en la cama, recordó lo que había pasado durante el día, y la imagen del rostro maduro y apuesto de él apareció en su mente.

Pensando en eso, se quedó dormida.

Al día siguiente, Alicia fue despertada por el sonido del teléfono.

Bostezando, vio que era una llamada de Rocío, y respondió de inmediato: —¿Qué pasó?

—Tienes que ver las noticias, la empresa del Grupo García hizo pública la entrevista de ayer, y esa historia de amor que inventaron ya se volvió tendencia.

Alicia abrió su celular, y efectivamente, ahí estaba.

Ahora a todos parece gustarles ese tipo de historias de amor tan bellas, y con el añadido de que el protagonista masculino tenía una discapacidad en la pierna, se volvía aún más conmovedor, atrayendo la atención de muchos.

Cuando salió a clase, le reenvió a Roberto esa noticia que estaba en tendencia.

Muy pronto recibió un mensaje por Instagram de Roberto: [¿Tienes tiempo al mediodía? Salgamos a almorzar, hablemos de trabajo.]

Alicia dudó un momento: [¿No podemos hablar en la oficina?]

[Estoy algo ocupado, no puedo ir a la empresa. Solo pasaré cerca de su universidad, aprovechamos para hablar.]

Alicia sabía que, con la posición y el estatus de Roberto, seguramente tenía más trabajo que hacer.

Después de clase, Sara dijo: —¿Vamos a almorzar juntas?

—Tengo algo que hacer, ve con Belén y coman juntas.

Alicia salió de la universidad y vio un auto de lujo estacionado al borde de la acera. Dudó por un instante, pero no se acercó.

En ese momento, recibió una llamada de Roberto: —¡Sube!

La ventanilla se bajó, y Alicia vio ese rostro apuesto y familiar.

Caminó hacia él, se inclinó y subió al auto.

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