Sin Reconciliación, me Casé con un Magnate romance Capítulo 764

Marco disfrutaba enormemente la manera en que María lo miraba; fue entonces cuando le dijo a Alicia: —Déjala libre.

Alicia alzó una ceja: —¿De dónde sacas el valor para darme órdenes?

Marco se sintió un poco incómodo, y entonces miró a María y dijo: —Solo responde con la verdad.

María seguía sin decir ni una palabra, esperando que Marco la ayudara.

Vicente no lo soportó más, se acercó y le dio una fuerte bofetada a María: —¡Te dije que hablaras, si no, no esperes salir viva de este lugar!

—¿Cómo se atreven a hacerme daño? ¡Eso es un delito!

Alicia respondió con frialdad: —¿Y lo que hizo tu padre en su momento, y lo que tú hiciste desviando fondos públicos? ¿Acaso eso no fue también un delito?

María empezó a sentir un miedo indescriptible.

Bajó con timidez la cabeza, calculando en su interior qué debía hacer.

Alicia perdió la paciencia: —María, ¿vas a hablar sí o no?

—Después de que mi papá me dijo que transfiriera el dinero, yo busqué una oportunidad para encontrarme con él, y luego trataría de conseguir una nueva identidad, irme a vivir a otro lugar. Así, ustedes no podrían encontrarme.

Jorge fue quien reaccionó con mayor intensidad al escuchar esas palabras.

Apenas le habían vendado la mano, y miró con despectivo a María: —Desde que éramos niños, nunca te hice daño. ¿Por qué tuviste que aliarte con tu padre para hacer esto?

María encogió el cuello, y llorando desconsolada dijo: —Porque sentía que Alicia lo tenía todo en la vida, y yo no tenía nada. Además, mi papá siempre me estaba amenazando una y otra vez, decía que, si no obedecía, les contaría a ustedes que él existía, y entonces me echarían de la familia García.

—¡Aun así debiste contárnoslo! Después de todo, lo que pasó en aquellos años no tuvo nada que ver contigo. Yo no habría descargado mi ira contra ti. Pero tú lo ocultaste todo, e incluso traicionaste a la familia García de la peor manera. ¿De verdad crees que eso te traería un buen final?

María se arrodilló en el suelo: —Jorge, de verdad, ahora sé que estuve equivocada.

—Si sabes que te equivocaste, entonces dinos de una vez por todas todo lo que sabes. ¿Dónde está el dinero?

Lo que más le preocupaba a Jorge ahora era el dinero.

—¡De verdad no lo sé! ¿Acaso Alicia no capturó a mi padre? Entonces, ella debería tener el dinero, ¿no es así?

María con agilidad desvió la atención de Jorge.

De hecho, Jorge miró a Alicia y dijo: —¿Y el dinero?