¡Sorpresa! Tuve Cuatrillizos con Mi Desconocido Esposo romance Capítulo 1060

Un momento de silencio envolvió la sala antes de que todas las miradas se posaran sobre Ramón Ortega.

"Señor Ramón, ¿sería posible realizar una prueba de paternidad?", preguntaron.

Ramón frunció los labios.

"Si mi esposa ya está planeando hacerle la vida imposible al hijo del Señor Bello, ¿creen realmente que el Señor Bello me dejará acercarme a Carol? ¡Ese hombre es como un demonio viviente, y yo no quiero meterme con él!"

Todos fruncieron el ceño compungidos.

Ramón continuó, "La persona que tengo infiltrada cerca de mi hermano dice que el Señor Bello al atacar a la familia Gil, no lo hace para ayudar a mi hermano, sino para vengar a su propia esposa e hijo.

Además, Carol siempre llama a mi hermano Señor Ortega. Si realmente fuera su hija, ya se habrían reconocido. ¿Para qué esperar?

Y conozco a mi hermano; con lo mucho que extraña a su sobrina, si hubiera encontrado a su hija, su reacción sería evidente.

Él es alguien muy leal y directo, no sabe actuar. Si realmente hubiera encontrado a su hija, estaría loco de alegría.

Y algo más, seguro que inmediatamente le habría informado a esa anciana en la montaña."

Todos asintieron. "Tiene sentido. Después de tantos años, una hija se reconocería inmediatamente con su padre, y el padre no podría esconder sus emociones."

"Joaquín nos odia con pasión. Si su hija regresa, se convertiría en el ganador y, en su emoción, seguramente apuntaría contra nosotros."

"Siempre y cuando Carol no sea la hija de Joaquín, ni siquiera la intervención divina podría ayudarlo. Por muy poderoso que sea el Señor Bello, no puede interferir en los asuntos de la agencia."

Entre todos, se aliviaron las preocupaciones y se reconfortaron.

El grupo, murmurando entre sí, comenzó a conspirar sobre sus planes de asesinato para después de la junta directiva.

Planeaban deshacerse de Joaquín y Lola, ¡y también aniquilar a la familia Díaz!

Hablando cada vez con más emoción, la atmósfera en la sala se volvió más activa.

"Con Joaquín y la familia Díaz fuera del camino, ¡Ciudad Pacífico será nuestro dominio! ¡Jajaja...!"

Pronto, estas escenas fueron transmitidas al reloj teléfono de Ledo.