Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 1004

Leia Ten cuidado, mi papá CEO Capítulo 1004

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Ten cuidado, mi papá CEO por Internet

Lena sintió escalofríos en su espalda, quizás por lo penetrante y fría que era la mirada de Simon. Ella pensó que había dicho algo malo y se corrigió rápidamente: “No... No es cooperación. Quise decir que trabajaré bien a su lado... Haré mi mejor esfuerzo por trabajar bien con usted”.

La mirada de Simon se volvió más fría. Él miró a Sharon y preguntó con voz severa: “¿Por qué me has traído a esta persona?”. Él podía adivinar la razón a estas alturas, pero quería escuchar a Sharon decirlo ella misma.

Por lo tanto, Sharon tuvo que explicar: “Simon, ya hemos hablado de esto. Por el bien de Sebastian, tienes que tener otro bebé, y Lena es...”.

“¡Suficiente! ¡Cierra la boca!”. La mirada de Simon era aterradoramente fría. ¿A Sharon en serio no le importaba el hecho de que él tuviera un bebé con otra mujer? ¡Sin mencionar que ella incluso se tomó la molestia de buscarle una mujer!

El corazón de Sharon también palpitaba dolorosamente. Esto no era realmente lo que ella quería para ellos, pero no podía quedarse de brazos cruzados y ver morir a su hijo...

Ella reprimió la amargura de su corazón y dijo con voz ronca: “Le dije a Lena que le daríamos una suma de dinero. Ella está dispuesta a cooperar con nosotros y a dar a luz a un bebé...”.

“Te dije que cerraras la boca y dejes de hablar. ¿No me entiendes?”, rugió Simon con frialdad, interrumpiéndola una vez más. Sus ojos oscuros la miraron fijamente mientras decía: “¿No fui lo suficientemente claro? Te he dicho que no voy a tener otro bebé con otras mujeres. ¡Encontraré otras formas de curar a Sebastian!”. ¿Por qué era tan reacia a darle tiempo?

Sin esperar a que Sharon respondiera, Simon miró con desprecio a la asustada Lena y le gritó: “¡Vete de inmediato! No necesito tu colaboración”.

Lena le tenía un poco de miedo, pero seguía sin estar dispuesta a ceder. Ella necesitaba dinero con urgencia y tenía que esforzarse por conseguirlo.

“Podemos intentarlo también a través de la fecundación in vitro...”.

“¡Largo!”. Simon no dejó lugar a la discusión sobre este asunto.

Sin embargo, Sharon pensó que la idea de Lena era factible y dijo: “Simon, ¿por qué no intentas la fecundación in vitro con ella?”.

Simon estaba tan enfadado que su cara empezó a ponerse azul y le advirtió a Lena una vez más: “Si no te vas ahora mismo, puedo hacer que alguien venga y te arrastre fuera de aquí”.

Ya que él parecía tan decidido, Lena pensó que era un caso perdido. Ella miró a Sharon y le preguntó: “¿Por qué me llamaste aquí si ni siquiera lo habías discutido?”.

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