Resumo de Capítulo 1346 – Ten cuidado, mi papá CEO por Internet
Em Capítulo 1346, um capítulo marcante do aclamado romance de Amor Ten cuidado, mi papá CEO, escrito por Internet, os leitores são levados mais fundo em uma trama repleta de emoção, conflito e transformação. Este capítulo apresenta desenvolvimentos essenciais e reviravoltas que o tornam leitura obrigatória. Seja você um novo leitor ou um fã fiel, esta parte oferece momentos inesquecíveis que definem a essência de Ten cuidado, mi papá CEO.
"Sharon, mírame y dilo otra vez. ¿No me conoces?". Simon pensó que ella fingía no conocerlo, pero por la forma en que se resistía a él, no parecía que estuviera fingiendo. No pudo evitar entrar en pánico.
Sharon se escondió en los brazos de Howard y parecía que estaba aterrorizada por Simon. ¿Cómo iba a atreverse a decirle una palabra más?
Ella jaló la manga de Howard y susurró: "¿Es realmente tu tío? Es tan malo".
Howard disfrutaba de la dependencia de ella hacia él. De hecho, cuando estaban enamorados, ella siempre lo había obedecido.
"Sí, es mi tío. Tal vez sufra algún tipo de defecto físico, por eso siempre tiene mal carácter". Howard miró a su tío, quien seguía en una silla de ruedas, y se preguntó si sus piernas seguían sin poder caminar.
Ya no era un hombre sano. ¿Cómo iba a ser capaz de darle felicidad a Sharon?
"Oh, así que es así". Sharon miró al hombre con cierta simpatía, pero la mirada de este sobre ella era demasiado intimidante, por lo que la apartó de inmediato.
"Howard, suéltala". El tono de Simon era frío. Deseó poder acercarse y recuperar a Sharon.
"Tío, eso que acabas de decir sonó muy extraño. No es que la haya atado, ¿qué quieres decir con eso?", preguntó Howard con una mirada de suficiencia. Sharon solo recordaba haber estado con él. Había vuelto con él.
En cuanto a su tío... Simplemente no podía alejarla de él.
"Claude, ve y trae a mi esposa de vuelta". Simon no quería seguir hablando de tonterías con Howard. Tenía que averiguar qué le había pasado a Sharon.
Claude se acercó enseguida con unos cuantos hombres.
"¡Tío, no hagas nada precipitado, no le hagas daño a Shar!". Howard vio esto e hizo de inmediato un gesto para proteger a Sharon.
La expresión de Simon era fría y sin emoción. Esperó tranquilamente a que Claude la trajera.
"¡Ah...! ¿Qué estás haciendo? ¡No me toques!".
Sharon gritó asustada mientras Claude y los demás la separaban de Howard.
"¡No me voy! Suéltame...". Sharon no entendía por qué Simon quería llevársela.
Ella volvió a mirar a Howard, quien seguía retenido, y le dijo: "Howard, no tengas miedo. No importa lo que me haga, ¡no aceptaré que nos separe!".
"Tío, por favor, no le hagas daño a Shar...". Howard lloraba fuertemente y suplicaba. Estaba dando una actuación de primer nivel.
"¡Howard, espérame, volveré!".
Él sonrió triunfante al escuchar las últimas palabras de Sharon.
La razón por la que estaba dispuesto a dejar que su tío se llevara a Sharon era porque no tenía que preocuparse de que Sharon cambiara de opinión. Ella solo lo amaba a él.
Simon llevó a Sharon a su casa y la examinó durante un rato antes de hablar: "Bien, Howard ya no está aquí. Ya puedes dejar de actuar".
Comentários
Os comentários dos leitores sobre o romance: Ten cuidado, mi papá CEO