Resumo do capítulo Capítulo 1472 de Ten cuidado, mi papá CEO
Neste capítulo de destaque do romance Amor Ten cuidado, mi papá CEO, Internet apresenta novos desafios, emoções intensas e avanços na história que prendem o leitor do início ao fim.
Tan pronto como la señora Wagner terminó de hablar, las pocas mujeres se dieron cuenta del cambio en la mirada de Sydney.
La señora Little añadió: “¿Cómo puedes decir algo así? ¿Significa eso que estamos viejas solo porque hemos dado a luz a bebés?”.
La señora Wagner frunció los labios y sonrió. “No quise decir eso. Todas somos mujeres que hemos dado a luz a bebés. Es normal que no podamos compararnos con las mujeres que no han dado a luz. Mira a la señora Newton. Su piel es más firme y suave que la nuestra. Aunque usemos mejores productos para el cuidado de la piel, no podremos compararnos con ella”.
“Tienes razón, señora Wagner. Dar a luz es extremadamente agotador para una mujer. Afortunadamente, tenemos la capacidad de conservar bien nuestra juventud. Tampoco tenemos que preocuparnos de cuidar a nuestros hijos”, dijo la señora Caesar mientras miraba a Sydney. Ella luego preguntó: “Llevas tres años casada con el presidente Eugene. ¿Aún no tienes intención de tener bebés? La casa de los Newton es dueña de un gran negocio familiar. Ellos necesitan un hijo o hija que herede la empresa, ¿verdad?”.
Sydney siguió sonriendo mientras escuchaba la conversación de ellas. Sin embargo, en su corazón, cundía el pánico.
Un año después de casarse con Eugene, la gente empezó a preguntarle cuándo pensaba tener un bebé cada vez que asistía a tales eventos.
Ella no podía tener un bebé solo porque lo quería, ya que no dependía solo de ella.
Ella no pudo evitar sentirse enfurecida cuando recordó cómo Eugene le había pedido que realizara una fecundación in vitro con esperma de un donante.
“Mi yerno dijo que él quiere disfrutar de su tiempo como pareja ahora. Además, Syd todavía es joven. No será demasiado tarde para tener un bebé dentro de uno o dos años”. La señora Neal resolvió la incómoda situación en favor de su hija después de ver que Sydney no sabía cómo responder a sus preguntas.
“Eso significa que ambos están aún en su fase de luna de miel a los tres años de su matrimonio. Ambos deben ser extremadamente cariñosos. ¡Qué admirable!”. A pesar de sus elogios, había una mirada burlona en los ojos de la señora Wagner.
“Es bueno disfrutar de su tiempo como pareja, pero es mejor tener un bebé lo antes posible. He oído que el presidente Eugene tiene una hija ilegítima. Es la única hija del presidente Eugene, ¿verdad?”, preguntó la señora Little.
Había una expresión desagradable en el rostro de Sydney. “Esta es la cena de cumpleaños del Viejo Amo. Todavía tengo que saludar a muchos otros invitados. Por favor, siéntanse en casa. Tengo que irme ya”. Sydney las miró con una sonrisa forzada antes de irse.
Las pocas mujeres le sonrieron condescendientemente cuando la veían salir a toda prisa.
“Supongo que ella no puede dar a luz a un bebé. ¿Qué es esa tontería de disfrutar de su tiempo como pareja…?”.
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