Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 153

Era Sharon.

Incapaz de soportarlo más, Douglas gritó: “¡Mujer seductora! ¡Ella de verdad es una seductora!”. Apuntando con su bastón a Simon, su voz tembló mientras decía con enojo: “No quiero verla nunca más. Será mejor que la hagas mudarse de la casa de los Zachary. ¡Eso o ustedes dos se divorcian!”.

Douglas estaba furioso, pero todavía tenía en mente a su pequeño nieto Sebastian. Es por eso que solo le había pedido a Sharon que se fuera de la casa de los Zachary y no obligó a Simon a divorciarse de ella.

Él no quería que volviera a suceder lo que había sucedido la última vez. Su pequeño nieto había hecho tanto alboroto y casi se lastimó al caer del árbol.

Él no quería ver a Sharon, y la mejor manera de manejar las cosas era hacer que se mudara de la casa y solo regresara cuando quisiera ver al niño.

Si hubiera una manera, esperaba que el niño nunca más tuviera que acercarse a una madre así. Sin embargo, eso parecía imposible con la forma en que estaban las cosas actualmente.

Penelope también pensó que era una buena idea que Sharon dejara la casa de los Zachary. Ya pensaría en formas de conseguir que Simon se divorciara de ella después.

Mirando con frialdad a Fiona, ella dijo: “Así que, ¿es esto lo que te referías cuando dijiste que Sharon estaba teniendo relaciones con un hombre vulgar en el hotel? ¿Dónde está el hombre vulgar? ¿Es Simon?”.

Fiona no sabía dónde había salido todo tan mal. ¿Por qué la escena era diferente a la que había planeado?

“Penelope, mis... Mis ojos podrían haberse equivocado...”. Fiona se sintió indignada, pero no tuvo más remedio que admitir sus errores.

“¿Equivocado? ¿Cómo pudiste siquiera cometer un error así? ¿Acaso te están fallando los ojos por la vejez?”. Penelope no se inmutó en ser cortés, ni consideró la relación que tenía con Fiona cuando la reprendió.

Fiona tenía una expresión fea en su rostro, pero ni siquiera pudo tomar represalias. Su corazón estaba lleno de odio, pero... al menos había conseguido que echaran a Sharon de la casa de los Zachary.

Douglas miró fijamente a Simon mientras repetía sus órdenes: “Hoy es la celebración del aniversario. ¡Será mejor que ustedes dos no sean tan imprudentes! ¡Deberías regresar al salón de baile de inmediato!”.

Simon frunció el ceño pero dijo con calma: “Papá, haré que se mude como quieras. En cuanto a la celebración del aniversario... Si tú y Penelope están allí, no creo que importe si me quedó por un rato más. Además, esta noche estoy ocupado”.