Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 1679

Dayton había contratado a los mejores piratas informáticos del mundo para diseñar el sistema de seguridad de la empresa, pero fue burlado tan solo en una noche. ¡Y encima, una gran parte de sus fondos habían sido robados!

“El equipo técnico ya está rastreando la falla de seguridad, pero nuestro oponente es extremadamente astuto. Él o ella debe ser un pirata extremadamente hábil. ¡No podremos rastrear su paradero específico por ahora!”.

“Si no podemos interceptar esta transferencia de fondos y recuperar el dinero, ¡todos ustedes deberían simplemente irse a la m*erda!”. Colgó la llamada y se dio la vuelta para agarrar la chaqueta de su traje y ponérsela. Tenía que dirigirse a los establecimientos que habían sido destruidos.

¿Quién estaba tratando de hacerle la vida imposible?

¡Ya vería cuando lo encontrase!

Cuando se disponía a salir corriendo de la casa a toda prisa, la cara inocente y adorable de Pequeña Pastelito apareció de repente frente a él. "Tío, ¿vas a salir?".

Ya estaba extremadamente molesto en ese momento, y se sintió aún más frustrado al ver el adorable rostro de la pequeña. No pudo evitar preguntar: "¿Crees que tu mami todavía te quiere?". ¡Habían pasado muchos días, pero esa mujer dejó a su hija en ese lugar para comer y beber gratis!

"¿De qué estás hablando? Por supuesto que mi mami quiere tenerme a su lado. No intentes arruinar nuestra relación”.

“Si ella quisiera tenerte a su lado, ¿por qué no ha venido a buscarte todavía?”. La expresión de Dayton se tornó lúgubre.

“Ya te lo dije. Ella está encargándose de un asunto importante en este momento. Además, ella sabe que estoy con Sirius, así que no tiene que preocuparse por mí en absoluto”.

¡El recordatorio de la niña le hizo darse cuenta de que estaba siendo tomado por un payaso!

Se había llevado a la niña a su casa, le proporcionó buena comida y bebidas, e incluso la dejaba jugar con su hijo. Si él fuera la madre de Pequeña Pastelito, ¡tampoco se preocuparía por ella!

Si ese era el caso, tendría que amarrar a la niña y dejar de darle comida o agua, tomarle fotografías y enviárselas a su madre. ¿Acaso eso la haría entrar en pánico?

Sin embargo, no tenía tiempo para hacer algo así en ese momento. Pensaría en eso después de resolver los problemas de su empresa.

Se inclinó y acarició la cabeza de la niña con una sonrisa malvada en su rostro. "Quédate aquí, sé obediente y disfruta de la felicidad que tienes… mientras puedas". Cuando él volviera, sus días felices llegarían a su fin.

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