Resumo de Capítulo 182 – Uma virada em Ten cuidado, mi papá CEO de Internet
Capítulo 182 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de Ten cuidado, mi papá CEO, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Amor, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.
Ella lloró aún más fuerte cuando vio la foto. Por casualidad, ella envió la foto y la persona que la recibió fue Sharon.
Sharon estaba preparando la cena para su hijo. Después de cenar con él, ella estaba de muy buen humor.
Más tarde, por la noche, ella lo bañó. Para terminar la noche, ella le leyó un libro sobre los misterios del universo antes de que él se durmiera obedientemente.
Sharon miró el reloj de la pared. Era casi medianoche y Simon, quien dijo que vendría al apartamento esa noche, nunca apareció.
De hecho, ella no creía en las palabras de los hombres.
Ella estaba a punto de tomar una ducha y descansar cuando su celular emitió un sonido notificándole de un nuevo mensaje. Cogió su celular y lo encendió. En un instante, ella se quedó completamente conmocionada.
Sharon estaba de pie, pero después de ver el mensaje en su celular, se sintió mareada por un momento. Ella no pudo evitar colapsar en la cama.
De repente ella recordó que su hijo estaba durmiendo. Ella estiró el cuello de inmediato para ver cómo estaba él. Por suerte, el pequeño solo se dio la vuelta y continuó durmiendo profundamente.
Ella estaba conteniendo la respiración hace un momento y ahora estaba recuperando lentamente la respiración antes de darse la vuelta robóticamente. Revisó el mensaje que acababa de recibir en su celular una vez más.
Era una foto. Una foto de Simon y Rebecca juntos.
¡Ella los vio acostados en la cama por esa foto!
Rebecca estaba acostada encima de Simon y él parecía que iba a besarla…
Sharon miró esa foto y le dolió el pecho como si hubiera algo pesado presionando encima de ella. Al mismo tiempo, sintió como si una mano estuviera apretando su corazón. Incluso empezó a sentir dolor al respirar.
Sintió lágrimas en las comisuras de sus ojos y la ira apareciendo en su corazón. Él había dicho que vendría al apartamento esa noche, ¡pero estaba tonteando con Rebecca en la cama!
Lo que su hijo le había dicho esa noche se repitió en su cabeza. El pequeño le había dicho que su papá se iba a casar con la Señorita Lawrence.
Después de que Sharon respirara agitadamente un par de veces, hizo todo lo posible por olvidar la foto antes de levantarse para tomar una ducha.
Sin embargo, esa noche se encontró sufriendo de insomnio a pesar de que su hijo estaba a su lado.
Ella miró el rostro de su hijo que era como una versión en miniatura de Simon, y cada vez le resultaba más difícil conciliar el sueño. Incluso recordó que en la foto, el lugar donde Simon y Rebecca estaban tonteando era el dormitorio de la casa de los Zachary.
En ese entonces, era el hotel, y ahora ellos habían pasado a la casa de los Zachary. Incluso a ella le costaría creer si le dijeran que ellos no se iban a casar.
Ahora, ella no podía dejar de pensar en las escenas de él y Rebecca… ¡Debe estar volviéndose loca!
Ella se tapó la cabeza con la manta. Para no pensar en eso...
Al día siguiente, Sharon tenía ojeras. Cuando su hijo la vio, él no pudo evitar preguntarle: “Mamá, ¿hiciste algo malo anoche y no dormiste? ¿Por qué te convertiste en un panda?”.
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