Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 489

La mirada de Eugene se volvió sombría. "No importa qué pase, sigue siendo mi abuelo. En este mundo, él es la familia más cercana que me queda aparte de ti".

No podía negar el hecho de que su abuelo fue muy severo con él desde que era joven y que tampoco recibió mucho cariño de él. Sin embargo, para alguien como él, era una suerte que todavía tuviera a alguien querido a quien pudiera apreciar.

Los dos se miraron a los ojos durante algún tiempo antes de que Sharon suspirara. "Entonces dime, ¿qué sucede entre tú y esa mesera de anoche?".

Cuando Sharon mencionó a Fern, Eugene frunció el ceño. Su expresión cambió cuando recordó los eventos que habían sucedido la noche anterior... de ella rompiendo el cheque y su espalda mientras abandonaba obstinadamente el lugar.

Él cerró los ojos y dijo con una voz muy profunda: "Ella es mi exnovia. Rompimos hace mucho tiempo".

Sharon no le hizo más preguntas, ya que la respuesta era la que esperaba.

No necesita preguntar porque ya sabía la razón detrás de su ruptura.

Ella dejó el tubo de ensayo y le dio unos golpecitos en el hombro. "Vamos, hermano. Regresemos a casa para encontrarnos con nuestras madrastras".

En la casa de los Newton.

Por lo general, solo estaban Quinn y los sirvientes en la casa. En ese momento, ese lugar ya no parecía tan tranquilo con todos en esa casa.

Sin embargo, era exactamente como lo había imaginado Sharon. La gente de la familia Newton era extraña. Tan pronto entró con Eugene, Sharon vio a algunas personas reunidas y sentadas en el pasillo. Ninguno de ellos habló, solo estaban sentados allí en silencio. El ambiente era muy silencioso y tranquilo.

Quinn, quien estaba sentado en el asiento principal, tenía los ojos cerrados para descansar un poco mientras Kelly estaba de pie detrás de él.

A su lado izquierdo había una figura bastante escuálida. No parecía estar en buenas condiciones, pero sus ojos eran agudos y vivaces.

Junto a la dama estaba Austin, quien estaba en silla de ruedas. Parecía que ella era su madre, la segunda madrastra.

Al lado derecho del anciano estaba una dama que parecía tener más de 40 años. Tenía un peinado elegante y su piel era clara y radiante. Parecía una dama con una presencia prestigiosa. Solo bastaba una mirada para saber que solía ser una belleza cuando era más joven.

‘Esa debía ser la madre de Jim. Entonces su madre es tan bonita. No es de extrañar que siempre use ropa brillante y siempre piense que es muy guapo'.