Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 502

En ese momento, el cuerpo de Glady estaba tapando a Sebastian, por lo que Sharon solo pudo verla cuando salió. No tenía idea de con quién estaba hablando Glady.

Mientras Sharon se acercaba, dio la casualidad de que Glady se dio la vuelta. Fue entonces cuando Sharon se dio cuenta de que su hijo había vuelto a aparecer de la nada.

Ella detuvo sus pasos y miró al niño con sorpresa. ¿Cómo la encontró allí?

Antes de que Sharon pudiera recuperarse de su conmoción, Sebastian corrió hacia ella y la abrazó por el muslo. “¡Por fin estás dispuesta a verme, mami!”.

“¿Por qué…?”. Ella miró a su hijo que estaba abrazando con fuerza su muslo y se sintió algo confundida. ¿Podría ser que Simon lo hubiera enviado allí?

Ella quería apartarlo, pero el pequeño estaba ejerciendo toda su fuerza para sujetarla. Era como si tuviera miedo de que ella se escapara o lo dejara de nuevo.

Sharon se cubrió la cara con impotencia y dijo: “¿Puedes soltarme primero?”.

“No, no lo haré. Si te dejo ir, ya no me querrás. Buuaaa... Soy tan lamentable. No tuve un papi en el pasado; ahora, no tengo un mami...”.

Sharon pudo sentir un fuerte giro en su corazón al escuchar las palabras de su hijo.

“¿Él es tu hijo, Sienna?”, preguntó Glady con sorpresa.

La pregunta de Glady la hizo volver en sí. Ella reprimió la desgana y la angustia en su cabeza, poniendo deliberadamente una expresión indiferente mientras decía: “¿Cuántas veces necesitas que te lo diga, niño? ¡No soy tu mami!”.

“No me importa lo que digas. Mami me abandonó hace dos años, y ahora todos se ríen de mí por ser un niño sin madre. Ya no quiero ir a la escuela ni conocer a nadie más. Sé que te has olvidado de mí, mami. ¿Pero no puedes ser mi mami por el momento?”.

Sharon. “...”.

“Buuaaa... Cada vez que hay una conferencia de padres y maestros, papi tiene que ir solo. Los demás papi y mami vienen en parejas, pero él viene solo y se ve tan lamentable. Incluso se están riendo de él hoy en día…”.

“Papi ha estado muy ocupado en el trabajo y se ha dedicado a buscarte. Apenas tiene tiempo para mí y no se molestó en echarme una segunda mirada cuando estaba enfermo. Cada vez que tengo fiebre, siempre pienso en ti, mami, y en lo agradable que sería si mi mami estuviera a mi lado... Mami, soy un niño tan solitario sin ti. ¿Puedes ser mi mami, por favor…?”.

Sebastian comenzó a sollozar tristemente mientras se lamentaba. Si bien Sharon no había dicho una palabra, Glady había comenzado a llorar junto a él.

“Él es un niño tan lamentable, señorita Sienna. ¿Por qué no acepta su petición y ya?”.

Los ojos de Sharon empezaron a temblar. El mocoso había crecido bastante y su acto desvergonzado se estaba volviendo demasiado ahora.