Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 625

Sharon sintió que se mareaba y todo su cuerpo estaba a punto de caer al suelo. Fern extendió rápidamente sus manos para sostenerla.

“¡Cuidado!”.

“¡Sienna!”. Glady también la ayudó apresuradamente.

La respiración de Sharon se hacía cada vez más ansiosa mientras agarraba la mano de Glady. Finalmente, le preguntó con voz grave: “¿Quién te dijo esto? ¿Quién te dijo que tuvo un accidente?”.

“Yo... acabo de recibir una llamada de la policía. Llamaron al laboratorio y me dijeron que le avisara”. Glady pudo ver lo pálida que se había puesto la tez de Sharon y no se atrevió a decir nada más.

Sharon se levantó y se sentó débilmente en su silla. Ella estaba completamente en trance. Si era una llamada de la policía, eso significaba que Eugene realmente tuvo un accidente automovilístico...

¡N-No! ¡Esto no era posible!

Ella se levantó de repente y corrió hacia la puerta con el paso acelerado. ¡Tenía que ir a buscar a Eugene!

Cuando llegó a la entrada, chocó contra alguien y las grandes manos del hombre la atraparon inmediatamente a tiempo.

“¿A dónde vas con tanta prisa?”. Simon la miró y vio la expresión que ella tenía en su rostro. Él tenía un mal presentimiento sobre esto.

“Simon. Mi hermano... Eugene... ¡Tu-tuvo un accidente! ¡Tengo que ir a buscarlo ahora!”. Sharon estaba al borde de las lágrimas.

‘¡No puedes morir cuando aún estoy aquí, Eugene!’.

Simon no volvió a interrogarla y, dado que el asunto era serio, simplemente dijo: “Iré contigo”.

“Está bien...”. Sharon reprimió el dolor en su corazón. No era el momento para que ella estuviera triste en este momento. Primero necesitaban encontrarlo.

“Espera. Yo también iré. ¿Me... pueden llevar con ustedes también?”. Fern se acercó corriendo. Sin importar cuánto trató de contenerse, no podía ocultar el hecho de que estaba preocupada por Eugene.

Sharon la miró y pudo sentir lo que Fern debía estar sintiendo en ese momento casi al instante. Por lo tanto, ella le dijo: “Vayamos juntos”.

“El personal de búsqueda y rescate bajó hace cinco minutos antes de que usted llegara. Así que, en este momento, aún no estamos seguros de la situación”, dijo el oficial de policía.

Cuando Sharon escuchó esto, su corazón lleno de ansiedad se alivió un poco. Sin embargo, mirando el coche debajo de ella, deseó poder bajar y rescatarlo por su cuenta.

Simon se acercó a abrazarla y le dio unas palmaditas en la espalda ligeramente mientras decía: “No te preocupes demasiado. Él estará bien”.

Fern se acercó y miró el coche cerca del fondo del acantilado. Era difícil imaginar que Eugene estuviera dentro del vehículo. Sin embargo, tras caer en el coche desde un lugar tan alto, ¿aún había alguna esperanza de supervivencia?

Ella temblaba levemente y sus extremidades se enfriaban. Ella pensó: ‘¡Eugene, si no mueres aquí, te perdonaré por haberme abandonado tan cruelmente en el pasado!’.

Los tres esperaron en la carretera. Después de esperar bastante tiempo, el equipo de rescate finalmente regresó cuando ya estaba completamente oscuro.

“¿Lo rescataron?”. Sharon se tambaleó para preguntarles. Sus ojos recorrían los alrededores en busca de la figura de Eugene...