Resumo de Capítulo 70 – Uma virada em Ten cuidado, mi papá CEO de Internet
Capítulo 70 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de Ten cuidado, mi papá CEO, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Amor, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.
En la sala de estudio, Douglas estaba sosteniendo el bastón con cabeza de dragón y estaba sentado en una silla roja de madera. Simon estaba sentado frente a él. El padre y el hijo estaban justamente hablando de Sharon.
Los largos dedos de Simon sostenían un cigarrillo encendido a medio fumar. En medio del humo, sus sólidos rasgos faciales mostraban una expresión seria.
Él entrecerró los ojos levemente cuando se enfrentó a la orden de su padre. "Papá, ella es la madre de mi hijo. Lo del tuyo no va a ser posible".
Douglas puso una expresión pétrea en su viejo rostro. Sus ojos borrosos aún tenían un brillo oscuro y agudo. "Las cosas serán fáciles si dices que te casaste con ella sólo por el niño. El niño pertenece a la familia Zachary. A partir de hoy, se criará en la familia Zachary. En cuanto a ella, solo dale algo de dinero y échala de la casa".
Sharon, quien estaba fuera de la puerta, lo escuchó, y esto le hizo sentir una llama de rabia ardiendo dentro de su corazón. Sus manos estaban apretadas con fuerza sin que ella se diera cuenta. Ella parió a ese niño después de estar embarazada por diez meses, y lo crió ella sola con el esfuerzo que no se podía imaginar. ¿Quién se creía que era él para apoderarse de su hijo con solo una palabra?
Él incluso comentó que le daría el p*to dinero y la echaría a la calle.
Ella estaba tan cerca de empujar la puerta para abrirla e irrumpir para hablar con Douglas. Sin embargo, ella solo apretó los puños y aguantó. No podía actuar de manera bruta.
Dado su estatus actual, ella no era capaz de ir contra la familia Zachary. Temía que si discutían, la echaran y le quitaran a su hijo.
Todo su cuerpo estaba tenso. '¿Simon estará de acuerdo con eso?'.
Después de un tiempo, Simon abrió la boca para continuar, hablando lentamente: "Padre, si seguimos tus instrucciones, Sebastian tampoco no podría quedarse en la casa de los Zachary".
La expresión de Douglas era pétrea y resopló: "Él es mi nieto. Si no está en la casa de los Zachary, ¿vamos a dejar que siga con esa mujer malvada? ¡¿No tienes miedo de que ella lleve a ese niño por un mal camino?!".
Él seguía recordando el incidente en el que Sally se cayó de las escaleras en la casa de los Zachary. Sally seguía afirmando que fue Sharon quien la empujó por las escaleras. Aunque Sharon lo negaba, él seguía pensando que no había ninguna razón para que Sally acusara a Sharon. Sally no sería tan cruel como para matar a su bebé solo para acusar a Sharon.
"Por ejemplo, él hará una huelga de hambre o seguirá tratando de escapar para buscar a su madre. Si eso ocurre, ¿vas a hacer que un guardia de seguridad lo vigile todos los días? ¿Cuál es la diferencia con encarcelarlo?".
En ese momento, Douglas no dijo nada. Con una mirada exasperada, él respiró hondo, como si estuviera considerando separar o no a la madre y al hijo.
Después de un momento, se escuchó su vieja voz: "Estoy bien si quieres que se quede, pero tienes que dejar que Rebecca sea tu secretaria".
Simon hizo coincidir su mirada con los ojos veteranos de su padre. Él en efecto era viejo, pero en el mundo de los negocios, todavía tenía algunos trucos bajo la manga.
"Papá, ¿estás tratando de negociar conmigo?". Los delgados labios de Simon estaban formando vagamente una sonrisa y sus ojos brillaban con furia.
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