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El dolor de Sharon fue completamente reemplazado por la ira. Ella saltó hacia adelante furiosamente y gruñó: “¿A dónde lo llevas? ¡Dejen de lastimarlo!".
"¡Te aconsejo que te preocupes más por ti misma!". El líder de los secuestradores les hizo un guiño a sus subordinados.
Al momento, uno de ellos trajo otra toalla para hacerla perder el conocimiento una vez más.
“¡M*lditos! Suél... ta... ¡Mmm!". Se desmayó una vez más después de inhalar el cloroformo.
...
Simon terminó apresuradamente el proceso de la boda y esperó a que el secuestrador lo llamara nuevamente.
Los invitados de la familia Newton se sintieron como si los hubieran tomado por tontos ese día. Después de levantarse y reprender a Simon, se fueron uno tras otro del lugar.
Simon mantuvo una cara hosca todo el tiempo y no impidió que los invitados se fueran. No era él quien quería continuar con esta ceremonia de bodas.
“¡Qué despreciable! ¡¿Cómo te atreves a hacernos perder el tiempo y hacernos parecer idiotas?!".
Los invitados de la familia Newton abandonaron la isla mientras lo maldecían en voz alta.
Lo que originalmente era una ceremonia de bodas animada quedó en silencio casi al instante.
Xena apenas tuvo un momento para disfrutar de su felicidad antes de que todos se fueran. Nadie se acercó siquiera para desearles lo mejor, y podía sentir los agravios llenando su pecho.
A Simon no le importaba ella en lo más mínimo, ya que estaba ocupado esperando la llamada telefónica. Xena no pudo evitar desear que Sharon cayera muerta en ese momento y no volviera a aparecer nunca más.
Tan pronto como sonó el teléfono, Simon contestó de inmediato la llamada. Sin embargo, no se esperaba que fuera una videollamada. ¡Qué salvajes!
Sharon apareció de inmediato en la pantalla de su teléfono, inmóvil en el suelo, aparentemente inconsciente.
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