Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 935

"¡Dije que me des el cuchillo!", rugió Tammy.

Jesse no deseaba que Tammy hiciera un berrinche, así que no tuvo más remedio que pasarle el cuchillo afilado. "Señorita Tammy…".

"¡Cállate la boca!", lo interrumpió Tammy inmediatamente sin piedad. Se acercó poco a poco al frente de Sharon mientras miraba su rostro, aún ligeramente pálido. Al verla, pensó en que Sharon no era particularmente atractiva, lo que solo la hizo sentir más celos. "Ya veremos si Henry seguirá queriéndote luego de que te destroce la cara", dijo mientras sonreía con frialdad.

Tal vez al sentir el peligro inminente, o quizás por no haber inhalado suficiente gas, Sharon comenzó a despertarse lentamente. Pero una vez abrió los ojos y vio un cuchillo afilado frente a ella, quedó inmediatamente perpleja. Después de un momento, notó que era Tammy quien estaba frente a ella, y esta última esbozaba una fría sonrisa. Pensando que estaba soñando, estiró instintivamente las manos y empujó a Tammy. "¡Aléjate!".

Tammy agarró la mano de Sharon y la miró con una sonrisa fría. "¿Cómo te despertaste? Bueno, me temo que es bastante desafortunado para ti. Ahora sentirás todo el dolor de lo que te haré".

Sharon miró a Tammy con cautela y preguntó con frialdad: "¿Qué intentas hacer, Tammy?".

"Pronto te enterarás", respondió la mujer.

Sharon miró el cuchillo en la mano de Tammy y su respiración se aceleró un poco. "¿Acaso vas a matarme?".

"Oh, sí, quiero verte morir, pero antes de eso, me encargaré de tu cara".

'¿Qué? ¿Mi cara?’, pensó. "¡¿Qué rayos te pasa?!". Sharon liberó su mano con fuerza. Sin embargo, al segundo siguiente, el cuchillo en la mano de Tammy se colocó en su rostro.

Los ojos de Tammy se llenaron de odio. "¡Imposible! Ningún hombre en el mundo querría estar con un esperpento. ¡Haré trizas tu cara y de seguro te abandonará!". Tammy no estaba dispuesta a creer que Simon quisiera tanto a Sharon. "¡Déjame demostrate lo equivocada que estás!", dijo Tammy mientras levantaba el cuchillo y lo acercaba a la cara de Sharon.

¡Sharon contuvo el aliento y levantó la pierna para patear a Tammy tan fuerte como pudo! El impacto hizo que la silla de ruedas comenzara a rodar hacia atrás.

"¡Señorita Tammy!". Preocupado por su jefa, Jeese soltó a Sharon y se acercó para sujetar a la silla de ruedas. La patada de Sharon dio justo en la herida en el abdomen de Tammy, lo que hizo que se abriera de inmediato y dejara salir un chorro de sangre. Tammy tenía tanto dolor que hizo una mueca horrible con su rostro. No pudo evitar hiperventilar mientras se retorcía de agonía, y dejó caer al suelo el cuchillo en sus manos.

Sharon se sentó en la cama de inmediato y levantó la guardia contra Tammy. "¡Si no quieres morir, será mejor que te vayas!", le rugió con frialdad, notando la sangre brotando del abdomen de Tammy. ‘Si Tammy no consigue atención de inmediato, me temo que no aguantará mucho más’.