Ten cuidado, mi papá CEO romance Capítulo 952

Ceylon había ayudado a Sharon a cuidar del laboratorio mientras ella no estaba durante este período de tiempo. A pesar de que había regresado, ella no podía volver al laboratorio a trabajar debido a su herida. Por lo tanto, Ceylon había ido a visitarla.

Él se dio cuenta de que había alguien más en la casa después de seguir a Sharon al interior. “¿Y quién es él?”, preguntó Ceylon con curiosidad mientras miraba a Simon evaluativamente.

Al principio, Sharon quería decirle que él era Simon. Sin embargo, ella cambió de opinión. Simon aún no había revelado su identidad a todos.

Simon vio a Ceylon sosteniendo un gran ramo de rosas rojas. No había nada de malo en que él le regalara a Sharon un ramo de flores cuando estaba de visita, pero parecía extremadamente inapropiado regalarle rosas.

“Querida, ¿este es tu profesor?”, preguntó Simon, fingiendo que era la primera vez que se encontraba con Ceylon.

“¿Oh? Eh... Sí, este es mi profesor, Ceylon Frank. Ahora es parte de mi equipo en el laboratorio. También es un buen amigo mío”, dijo Sharon. Ella no entendía por qué Simon la había llamado querida de repente.

“¿Querida? Shar, tú y él…”. La mirada de Ceylon se volvió más severa cuando escuchó a Simon dirigirse a ella como su querida.

“Él... Él es mi novio”. Sharon lo pensó por un rato y pensó que sería lo más apropiado llamarlo su novio. Ella no podía decirle que él era su marido, ¿verdad?

“¿Qué? ¿Novio?”. Ceylon estaba realmente sorprendido. ¿Trajo a un novio con ella después de hacer un viaje al País M? “¿Estás bromeando?”, preguntó Ceylon. Él no le creyó porque sabía que ella había estado buscando a Simon todo este tiempo.

“No estoy bromeando. Él es mi novio. Su nombre es Henry”, dijo Sharon con una expresión seria en su rostro.

Ceylon aún estaba frunciendo el ceño. “Pero…”.

“¿Cuál es el problema? ¿Crees que no hago una buena pareja para Sharon?”, preguntó Simon mientras miraba a Ceylon con una sonrisa ambigua en su rostro.

Ceylon lo miró con más atención. Él no sabía qué tipo de enfermedad padecían las piernas del hombre ni sabía por qué no podía caminar, pero pudo notar que era extremadamente guapo. Él emanaba un aura desalentadora que impedía que otros se le acercaran. Ceylon no podía adivinar los detalles de la identidad y los antecedentes de Henry, pero si estaba discapacitado, definitivamente no haría una buena pareja para Sharon.

“No estoy seguro de esto. Por eso quiero dejar las cosas claras”.

La mirada de Simon se volvió más gélida. Él no tomó en serio las palabras de Ceylon.

“Lo siento, pero aún no tienes derecho a interrogarme”.

La expresión de Ceylon cambió al escuchar esto. “Tú…”.

“¿Qué están haciendo ustedes dos? Háblense con respeto”, dijo Sharon de inmediato al detectar el ambiente tenso entre ambos.

“Shar, ¿estás segura de que lo quieres como tu novio? ¿De verdad te gusta?”, preguntó Ceylon. Le costaba creer que Sharon se hubiera enamorado de otro hombre tan fácilmente, tomando en cuenta la existencia de Simon.