Venganza Reencarnada de la Rica Heredera romance Capítulo 399

399 /736

Rafaela, sin prestar mucha atención, desgarraba el pan en sus manos. "Deja de darte tanta importancia, siempre merodeando frente a mí, ¿no te cansas? ¿No puedes hacer como antes y encontrar una excusa para irte de viaje al extranjero?"

Durante los tres días que había estado en casa recuperándose, Liberto había aparecido casi a diario frente a ella. Incluso cuando estaba en su habitación leyendo, él se quedaba al lado observándola.

"Ya no tengo apetito."

Rafaela dejó caer el pan que tenía en las manos, tomó su bolso y se fue, subiendo al coche que ya estaba preparado.

Mauricio frunció el ceño con fuerza: "Con ese carácter, la señora no la va a querer."

Liberto respondió: "Esto no es asunto de la familia Huerta."

Mauricio apretó los labios y no dijo más.

En el coche, Liberto tomó su mano, palpando su temperatura. "Esta noche lloverá, recuerda ponerte bien la chaqueta."

Rafaela intentó retirar su mano, pero no pudo.

Liberto la sostuvo hasta que casi llegaron a la escuela, y entonces la soltó.

Al llegar a la entrada de la escuela, soltó su mano, abrió la puerta del coche rápidamente y salió, cerrando la puerta con fuerza.

Justo en ese momento, Maritza bajó del coche de Alonso y corrió hacia Rafaela, tomándola del brazo. "¡Rafaela... por fin regresaste, déjame ver si todavía te duele!"

"Rafaela, ¿qué te pasa? ¿Por qué no me hablas?"

"Te contaré algo curioso, sobre esa pequeña arpía de Penélope, ¿quieres saber?"