Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1011

Wilbur miró a la chica, antes de volver a mirar a Milo. "¿Quién es esta?".

"Esta es Wengie Cooper. Es la técnica del departamento y también mi hija", dijo Milo de inmediato.

Wilbur sonrió. "De tal palo tal astilla. Pero como he dicho, esto pertenece ahora al Departamento de Investigación y Defensa Paranormal".

"Señor, este es un artefacto que pertenece a la provincia de Esmeralda. Usted no tiene derecho a ello", dijo Wengie.

Wilbur miró a Wengie con impaciencia.

El pecho de Wengie se estremeció bajo su mirada, pero le sostuvo la mirada con todo su valor y se negó a retroceder.

Wilbur no pudo evitar sacudir la cabeza. ¿En qué estaba pensando esa gente, intentando arrebatarle algo que quería?

En ese momento, diez coches de las Fuerzas Especiales se detuvieron a la entrada del valle con sus sirenas sonoras.

Casi un centenar de agentes de las Fuerzas Especiales salieron, irrumpieron y rodearon la zona.

Un anciano larguirucho de unos cincuenta años vestido de traje lideraba el equipo, con dos hombres detrás de él.

"¡Secretario Howie!". Milo se apresuró a saludar al hombre, estrechándole la mano antes de dar una explicación apresurada.

El mayor, el secretario Howie, asintió después de escucharlo todo y se dirigió hacia Wilbur.

"¿Quién de ustedes es el señor Wilbur Penn, del Departamento de Investigación y Defensa Paranormal?".

"Soy yo", dijo Wilbur.

"Tony Howie, estoy a cargo de la provincia Esmeralda. Es un placer conocerlo". Tony le tendió la mano con cordialidad.

Wilbur estrechó la mano de Tony, asintiendo en señal de reconocimiento.

Justo entonces, Wengie dijo: "Secretario Howie, el esqueleto que intentan llevarse es importante para nuestra investigación. Por favor, dígales que nos lo entreguen ahora mismo".

Tony la miró con el ceño fruncido, antes de hacer un gesto a Milo para que se acercara.

Como si se atrevieran a decir algo más ante semejante poder.

Wilbur les sonrió. Luego, avanzó dos pasos y recogió un trozo roto del cuchillo de trueno.

El cuchillo de trueno se había roto en cientos de pedazos. Su estructura había quedado completamente destruida por el poderoso ataque de Rinchen y se había convertido en trozos de chatarra sin valor.

Ya no tenía remedio.

Wilbur perdió su cuchillo de trueno.

Sin embargo, en comparación con el cuchillo de trueno, lo que Wilbur había ganado era bastante notable.

Incluso solo con contribuir con el esternón de cristal obtendría a cambio una increíble cantidad de puntos de gracia, por lo que la pérdida del cuchillo de trueno no le resultó demasiado dolorosa.

Justo entonces, Wilbur se dio cuenta de que una planta crecía a sus pies.