Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1161

La Oscura Dispersión pasó zumbando entre la gente como una guadaña y nadie parecía capaz de detenerla.

Isaac fue el único que logró lanzar un grito, invocó una espada espiritual y la lanzó hacia la Oscura Dispersión antes de darse la vuelta para huir.

Sin embargo, la Oscura Dispersión se iluminó de inmediato con llamas espirituales, con runas ardiendo intensamente entre las llamas.

La espada espiritual de Isaac fue destruida al instante. La Oscura Dispersión lo alcanzó al instante y le atravesó el cuerpo.

Isaac gritó de dolor y cayó al suelo indignado.

Estaba muerto de miedo y no podía concentrarse en defenderse. Intentar huir solamente le trajo una muerte más rápida.

Los alumnos restantes eran aún más impotentes ante los ataques de la Oscura Dispersión. En menos de un minuto, la plaza estaba cubierta de cadáveres, manchando el suelo de rojo sangre.

Lucio no pudo ocultar su emoción al ver cómo sus enemigos eran eliminados para siempre.

Justo entonces, Sophie, Demi y los demás se acercaron a Wilbur y le hicieron una profunda reverencia.

Wilbur asintió con la cabeza.

Lucio dijo: "Por favor, venga conmigo, señor Penn. Dejaré que los demás descansen. Todavía tenemos trabajo que discutir después de esto".

Wilbur asintió.

Ahora que el trabajo estaba hecho, era hora de recibir su recompensa.

No había forma de que hiciera todo eso gratis.

Demi y los demás también fueron invitados a unirse a la discusión, lo que significaba que definitivamente se trataba de la declaración de tierras.

A continuación, Wilbur y los demás siguieron a Lucio a la Ciudad Nébula, donde se instalaron en el hotel más lujoso del lugar.

Lucio se marchó después de eso. Tenía prisa por discutir el siguiente plan de acción con el presidente, así como la situación con Wilbur, Demi y los demás.

Wilbur no tenía prisa. Se instaló en una habitación con Shepard y bebió tranquilamente en la sala.

Esa noche, el hotel quedó cerrado al público.

Shepard envolvió su Espada Larga Natural con un trozo de tela blanca y se la echó a la espalda mientras seguía a Wilbur en silencio.

Todos los hombres y mujeres no podían evitar mirar a Shepard cuando pasaban junto a él.

Este hombre era demasiado guapo.

Tenía un aire de tristeza que lo hacía aún más atractivo.

Justo cuando Shepard y Wilbur estaban paseando, un coche de lujo se detuvo justo en su camino.

Una hermosa mujer de unos treinta años salió del coche, acompañada de dos fornidos guardaespaldas, mientras examinaba a Shepard.

"Tráiganlo de vuelta".

Los guardaespaldas se acercaron a Shepard, dispuestos a llevárselo.

Wilbur se quedó boquiabierto mirando a la mujer con incredulidad.