Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1458

Los cultivadores de Westeria, por otro lado, volvieron a sus sentidos después de que su breve subidón hubiera desaparecido. Ahora estaban desorientados por un profundo temor.

Wilbur había vuelto. ¿Dónde estaba el maestro Atrus entonces?

A pesar de que se negaban a creerlo, era cierto que solo el vencedor sobreviviría a una batalla como aquella.

¿Cómo podía ser? ¿Cómo pudo perder el maestro Atrus?

En ese momento, una docena de figuras volaron sobre el océano. Aterrizaron detrás de Wilbur, de rodillas.

Los cultivadores del muelle palidecieron de inmediato al verlas.

¡Eran los cultivadores de nivel Santuario que habían ido a la batalla con el maestro Atrus!

Además, se suponía que eran sesenta. ¿Por qué apenas quedaba un tercio de ellos? ¿Por qué estaban todos arrodillados? ¿Dónde estaban los demás?

Al segundo siguiente, un profundo terror se apoderó de sus almas.

¿Podría el maestro Atrus realmente haber perdido? ¿Por qué si no sería Wilbur el que estaba aquí de pie?

Además, menos de la mitad de los cultivadores de nivel Santuario estaban arrodillados detrás de él.

Justo entonces, uno de los cultivadores de nivel Super Santuario que estaba detrás de Wilbur dijo: "Díganle a todos los cultivadores de Westeria que el maestro Atrus ha sido derrotado en la batalla y ha perecido. El señor Wilbur Penn ha ganado limpiamente e incluso nos ha concedido la generosidad de perdonarnos la vida. Todos los cultivadores de Westeria deberán inclinarse ante el señor Penn y partir de inmediato, o serán asesinados sin piedad".

Esta era una decisión que los supervivientes restantes habían tomado tras una breve discusión.

Tenían que decir la verdad sobre el resultado de la batalla y decirle a todos los cultivadores de Westeria que se rindieran antes de retirarse tan rápido como pudieran.

Si esta gente enfurecía lo más mínimo a este terrorífico dios, el sacrificio del maestro Atrus a cambio de sus vidas se iría al traste y el círculo de cultivadores de Westeria sería aniquilado.

Los cultivadores de nivel Santuario no podían soportar la idea de que eso ocurriera y por eso se habían apresurado para que su más poderoso super cultivador de nivel Santuario, Romandy, hiciera una declaración.

Los otros cultivadores aún no podían creer las palabras de Romandy, quedándose paralizados en el suelo, aturdidos.

Romandy vio esto y gritó: "¿Por qué no se inclinan? ¿Acaso tienen ganas de morir?".

Su voz resonó en las almas de la gente, haciendo que se estremecieran por todas partes.

Por fin se habían dado cuenta de que el maestro Atrus había muerto de verdad.

Se inclinó ante Wilbur y los demás le siguieron. Se inclinaron juntos una vez más, antes de irse por su cuenta.

Un lobo herido tendría que lamer sus heridas y ellos tenían que atender sus heridas, así como hacer todo lo posible para sanar. Esa era la única esperanza que le quedaba al círculo de cultivadores de Westeria.

En cuanto a la venganza, sería mucho mejor que abandonaran la idea por completo.

Habían tenido suerte incluso de tener supervivientes de la batalla y eso solo se debía a que Atrus se había sacrificado.

Cuando todos se fueron, Wilbur dejó escapar un suspiro.

No disfrutaba matar en lo más mínimo, pero no tendría piedad con aquellos que intentaran matarlo.

Justo en ese momento, vio que había algunas figuras que seguían de pie a una buena distancia.

Las miró y se acercó con el ceño fruncido.

"¿Qué hacen aquí?", preguntó Wilbur.