Resumo do capítulo Capítulo 1531 de Viviendo con Mi Jefa Esposa
Neste capítulo de destaque do romance Urbano Viviendo con Mi Jefa Esposa, Internet apresenta novos desafios, emoções intensas e avanços na história que prendem o leitor do início ao fim.
Seamus sentía que podía gobernarlo todo con su nuevo poder. Era como si fuera el rey del mundo.
Seamus soltó una carcajada maníaca.
Sawyer preguntó con cautela a un lado: "Padre, ¿absorbiste el poder del tesoro?".
"Así es", admitió Seamus.
Sawyer dijo rápidamente: "Felicidades, papá. Te has convertido en el cultivador supremo y nuestra familia gobernará el mundo".
"Así es. Vamos a gobernar el mundo".
La anormalidad en Seamus comenzó a desvanecerse gradualmente y se volvió normal de nuevo.
Sawyer por fin se relajó porque hasta entonces su padre le daba demasiado miedo.
No le cabía duda de que se convertiría en un cadáver seco si su padre lo necesitaba.
Sin embargo, parecía que ya había acabado, así que su vida estaba a salvo por ahora.
Seamus fulminó a su hijo con la mirada y le preguntó despacio: "¿Tienes miedo?".
"N-No. Sé que no me harías daño, papá", mintió Sawyer.
Seamus suspiró y acercó la mano al hombro de su hijo.
Sawyer parecía aterrorizado. Quiso esquivarlo, pero no se atrevió. Se obligó a quedarse quieto mientras veía cómo su padre le tocaba el hombro.
"Eres el único hijo que tengo. Lo he hecho todo por ti", murmuró Seamus.
Seamus parecía sentimental. Dijo lentamente: "Solo los muertos pueden guardar un secreto. Seré juzgado por el mundo si se corre la voz. Ahora mismo no soy capaz de ir contra el mundo".
"¡No se lo diré a nadie! ¡Lo juro! Por favor, ten piedad de mí, papá. Soy tu único hijo, ¿no?".
Sawyer gritó desesperado. No podía creer que su padre intentara matarlo para guardar un secreto.
Seamus empezó a mostrarse frío y despiadado. Dijo lentamente: "Descansa en paz. Un padre es quien mejor conoce a su hijo. Sé quién eres y no puedes guardar un secreto. Tu muerte es mi apuesta más segura. Vete, puedo mantener a nuestra familia yo solo".
"¡Seamus Rocher! ¡Eres un monstruo! ¡Ni siquiera tienes piedad de tu hijo! ¡Eres peor que un animal!", gritó Sawyer a pleno pulmón. Se quedó mirando furioso a su padre.
Sin embargo, Seamus no reaccionó y dijo fríamente: "No hay éxito sin sacrificio. Tú eres igual que ellos y serás sacrificado por el linaje Rocher. Recordaré todos tus sacrificios".
"¡Papá! ¡Papá! ¡Ten piedad de mí!", gritó Sawyer con dolor.
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