Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 1834

Wilbur estaba casi al límite de sus poderes. La reacción de su brazo derecho le hizo darse cuenta que no podría aguantar demasiado tiempo. Por eso actuó rápidamente cuando vio que las huellas giraban sobre la arena del mar.

"¡Luz de dragón!".

Wilbur golpeó instantáneamente el abdomen de Jeckle.

"¡Roar!".

El dragón dorado rugió furioso. Luego, salió volando del brazo derecho de Wilbur. El poder negro de la destrucción y el poder blanco de la luz golpearon a Jeckle en el abdomen al mismo tiempo. La energía espiritual de tipo trueno estalló y formó una figura humana en el aire.

Entonces, un rayo de luz blanca salió disparado de la figura. Jeckle salió instantáneamente de su estado invisible. Gritó de dolor: "¡Argh! ¡Mis núcleos de cristal de llama! ¡Urgh!".

Jeckle escupió una bocanada de sangre, luego miró a Wilbur con los ojos rojos. Apretó la mandíbula y dijo: "¡Te mataré, Trevor Penn!".

La energía espiritual de las llamas brotó de su mano derecha. Golpeó abruptamente el suelo y gritó: "¡Dominio del Mar de Fuego!".

Las llamas se extendieron instantáneamente, formando un espacio de llamas. Jeckle miró a Wilbur y dijo: "¡Esta vez te haré pedazos, Trevor Penn!".

Jeckle desapareció de nuevo. Mientras tanto, las manos seguían extendiéndose en el mar de fuego. Los gigantes de llamas seguían formándose en las llamas en expansión y atacaron a Wilbur.

Los gigantes de llamas no eran muy poderosos y Wilbur podía matarlos de un solo golpe. Pronto mató a más de diez gigantes de llamas. Sin embargo, Wilbur se sintió extremadamente preocupado. Jeckle era demasiado poderoso, después de todo. ¡No podía creer que Jeckle pudiera volverse invisible de nuevo!

Ese golpe contenía la Luz de Dragón, y el lugar donde golpeó fue calculado. Sacó con éxito a Jeckle de su estado de invisibilidad, lo que demostró que los núcleos de cristal de llama dentro de su cuerpo debían haberse hecho añicos.

Además, sintió que dos núcleos de cristal de llama se rompieron. Wilbur ejecutó su plan a la perfección con ese golpe, pero no esperaba que Jeckle se volviera invisible de nuevo.

Las llamas estaban por todas partes y salían chispas.

"¡Te voy a matar, Trevor Penn!".

Wilbur se dio cuenta de algo en ese momento. Su arduo trabajo dio sus frutos. Jeckle seguía siendo invisible, pero los núcleos de cristal de llama dentro de su cuerpo estaban destrozados. Su cuerpo no podía absorber la energía espiritual que brotaba, lo que quería decir que aparecían ondas de energía espiritual cada vez que atacaba.

Por lo tanto, podía alejarse al sentir las ondas, lo que le permitía esquivar los ataques de Jeckle.

De repente, apareció una onda de energía espiritual. Wilbur se alejó y esquivó el ataque de Jeckle.

Wilbur esquivó dos veces porque tenía miedo que Jeckle se diera cuenta. Se detuvo y pensó rápidamente. La solución era temporal, después de todo. Si no podía encontrar una forma de localizar a Jeckle terminaría fracasando.