Resumo do capítulo Capítulo 223 do livro Viviendo con Mi Jefa Esposa de Internet
Descubra os acontecimentos mais importantes de Capítulo 223, um capítulo repleto de surpresas no consagrado romance Viviendo con Mi Jefa Esposa. Com a escrita envolvente de Internet, esta obra-prima do gênero Urbano continua a emocionar e surpreender a cada página.
No era otro que Dorson. Agarró a Sherry por el cuello, protegiéndose detrás de ella.
Atravesar la pared le exigía utilizar energía espiritual, y no tenía más remedio que mostrarse.
Al mismo tiempo, un equipo de oficiales de la sala de control se apresuró a rodear la celda de detención y apuntar a Dorson con sus armas.
"¡No se mueva! Suelte a la señorita Divos". Gritó uno de los agentes.
Dorson no le hizo caso y esperó pacientemente.
Estaba dispuesto a morir en el cumplimiento de la misión, pero elegiría escapar si le daban la oportunidad de reunirse con su familia en casa. Mientras cumpliera la misión que le habían asignado, la compañía probablemente no lo culparía.
En ese momento, Elsa llegó corriendo al lugar. Apuntó a Dorson con su pistola y le preguntó: "¿Quién eres y por qué mataste a Jordan Pavian?".
Elsa estaba furiosa. Alguien había irrumpido en el departamento y había matado a un criminal importante. No solo sería una grave incompetencia por su parte, sino que además era humillante. Si este hombre no tuviera a alguien como rehén, ella ya lo habría despedazado.
"¡Consígueme un coche con el depósito lleno y que se vayan todos! La soltaré cuando haya llegado a un lugar seguro". Dijo Dorson con frialdad.
Elsa gritó: "¿Por qué debería creerte? Rendirte es tu mejor opción ahora mismo".
Dorson apretó con más fuerza el cuello de Sherry, quien gritó de agonía.
La expresión de Elsa se tensó durante un rato. Finalmente, bajó el arma lentamente.
Obligándose a calmarse, miró el cadáver de Jordan. Este asesino había sido capaz de colarse en las Fuerzas Especiales sin dejar rastro. Era una mala señal.
"Hablemos de esto. No hagas daño a la chica. Trabajaremos contigo". Dijo Elsa.
Sacó el teléfono a escondidas y marcó el número de Wilbur antes de volver a guardarlo en el bolsillo y seguir negociando con Dorson.
Wilbur contestó a la llamada. Saludó dos veces, pero no contestó.
"¡M*erda! Elsa tiene problemas".
Eso fue todo lo que Wilbur alcanzó a decirle a Faye antes de salir a toda prisa de la casa, corriendo hacia el departamento de Fuerzas Especiales.
La única solución que se le ocurrió en una situación así fue pedir ayuda a Wilbur.
Esperaba que Wilbur se diera prisa.
Pasaron unos minutos más y Dorson había llegado al complejo exterior del departamento. Había un coche aparcado en medio del claro.
"Dile a los dos francotiradores del tejado que se vayan". Dijo Dorson con frialdad.
Elsa suspiró y agitó una mano. Los dos francotiradores se vieron obligados a retirarse.
Con Sherry todavía agarrada con fuerza, Dorson corrió hacia el coche a la velocidad del rayo, antes de que nadie pudiera reaccionar.
Abrió la puerta y lanzó a Sherry hacia Elsa con un rápido movimiento.
Al mismo tiempo, canalizó una oleada de energía espiritual hacia Sherry. Sherry salió volando por los aires, soltando sangre por la boca, antes de aterrizar en una pila delante de Elsa.
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