Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 269

Resumo de Capítulo 269: Viviendo con Mi Jefa Esposa

Resumo do capítulo Capítulo 269 de Viviendo con Mi Jefa Esposa

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Eileen se burló. Lanzó sus espadas hacia fuera y volaron por el aire hacia Suelyn.

Suelyn soltó una risita sorda. La espada de sangre que empuñaba giró en círculo, formando un escudo de energía que apartó de un golpe las espadas de Eileen.

La energía espiritual de Eileen explotó entonces y juntó las palmas de las manos. "¡Doble Elevación!".

Las espadas parecieron azotar hacia atrás bajo la orden de Eileen, atacando a Suelyn desde múltiples ángulos a la velocidad de la luz.

Suelyn soltó un aullido, ajena al ataque mientras lanzaba un ataque en dirección a Eileen.

Eileen era incapaz de moverse porque estaba lanzando el Doble Elevación y el ataque de Suelyn estaba a punto de golpearla.

Justo entonces, Eileen gritó: "¡Escudo!".

La armadura espiritual de su cuerpo creció, formando un gigantesco cuerpo de armadura de unos tres metros de altura que la protegía en el centro.

El ataque de Suelyn emitió un sonido ensordecedor al chocar con la armadura.

La armadura brilló con energía espiritual al desviar el ataque de Suelyn.

Las dos espadas de Eileen seguían trabajando, atacando a Suelyn. No se podía subestimar a un cultivador de nivel Santuario.

Incluso Suelyn, en su forma demoníaca, no se atrevía a dejar que las espadas de Eileen tocaran su cuerpo. Todo lo que Suelyn podía hacer era desviar y atacar cuando tuviera la oportunidad.

Al mismo tiempo, la luz sagrada de Constantino finalmente golpeó a Suelyn.

La energía de la Iglesia de los Santos Illuminati era naturalmente repelente contra todas las fuerzas y seres del mal.

Sin embargo, los poderes de Suelyn habían superado a los de Constantino. Un escudo de sangre apareció justo antes de ser golpeada, absorbiendo el golpe.

A pesar de todo, el propio Constantino también era un cultivador de nivel Santuario y era increíblemente poderoso.

La energía espiritual de los tres cultivadores, sin embargo, no tenía forma de recargarse. No pasaría mucho tiempo antes de que terminaran perdiendo.

El lago de sangre era la fuente de energía de Suelyn y este era su territorio.

Probablemente por eso había atraído a los tres hasta aquí.

Pero el lago de sangre era bastante grande y la sangre que contenía apenas se había agotado desde el comienzo de la batalla.

Parecía que la energía de Suelyn era prácticamente infinita.

Wilbur blandió su cuchillo de sangre y mató a unos cuantos lobos de sangre más. Vio cómo se disolvían en charcos de sangre que se filtraban por el suelo y volvían al lago de sangre.

Eso no iba a bastar.

Wilbur frunció el ceño y empezó a pensar en una nueva estrategia.

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