Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 2806

Resumo de Capítulo 2806: Viviendo con Mi Jefa Esposa

Resumo de Capítulo 2806 – Viviendo con Mi Jefa Esposa por Internet

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Wilbur no había recibido esta protección y no sabía cómo conseguirla. Por lo tanto, la única forma de hacerse más poderoso era a través del Altar del Dragón en su demiplano.

Dado que las monedas de oro podían canjearse por puntos de gracia, podría obtener cincuenta mil puntos de gracia de su batalla. ¡Eso sin duda le haría más poderoso!

Edmund se puso en pie. "¡La batalla comienza oficialmente ahora!".

Conrad liberó una poderosa aura de energía. "¿Cómo te gustaría hacer esto, Wilbur?".

Wilbur liberó la misma cantidad de aura de energía también. "¿El primero que toque a la otra persona en quince minutos gana?".

"Claro".

Al segundo siguiente, Conrad salió corriendo hacia Wilbur, que se apartó del ataque. A continuación, Conrad siguió atacando a Wilbur sin descanso.

Los dos hombres se persiguieron por el patio, sin detenerse lo más mínimo. Cuando todo el mundo estaba concentrado en la batalla, Edmund metió una píldora negra en un vaso de vino. La píldora se volvió transparente en cuanto tocó el líquido, desapareciendo de la vista.

Edmund cogió el vaso y lo agitó en la mano antes de dejarlo en el suelo. Levantó la vista y vio que Wilbur empezaba a ganar velocidad y Conrad la estaba perdiendo.

Después de poco más de diez segundos, Wilbur empezó a perseguir a Conrad. Alcanzó a Conrad un minuto antes de que se acabara el tiempo, cogiéndolo por la manga.

Los dos hombres se detuvieron por fin, y Wilbur sonrió a Conrad. "Perdiste".

Wilbur quería desafiar a Grote, pero Félix le disuadió. Wilbur sabía que no era el líder de la familia y que solo estaba allí como invitado de Félix.

Si Wilbur desafiaba a Grote y volvía a ganar, Félix acabaría siendo desafiado después. Si Félix perdía, volverían a reírse de él.

Por lo tanto, Wilbur solo podía sentarse allí hasta que terminara el banquete.

Los dos abandonaron la residencia del señor en un carruaje, y Félix se volvió hacia Wilbur. "¿Cree que había algo raro en el señor Edmund hoy, Maestro?".

"¿Algo raro?".

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