Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 295

Dom se apresuró a decir: "No es que no te crea. Solo quería asegurarme porque es importante".

"No te preocupes. Entiendo perfectamente por qué tienes cuidado. La estatua de jade es cara, después de todo. ¿Trajiste el collar?", preguntó Wilbur con una sonrisa.

Sammy sacó apresuradamente el collar de su bolso y se lo pasó a Wilbur. Ya no se atrevía a llevarlo desde que Wilbur le confirmó que le pasaba algo.

Quería tirarlo, pero pensó en lo problemático que sería si necesitara el collar para romper la maldición, así que lo guardó lejos de ella.

Wilbur cogió el collar y transfirió su energía espiritual al colgante de rubí rojo.

La maldición contraatacó inmediatamente con energía negativa. Sin embargo, Wilbur la venció al instante gracias a su fuerte energía espiritual.

Cuando su energía espiritual se infiltró en la maldición, también vio algo en su conciencia.

Vio a una chica vestida de rojo arrodillada frente a un hombre de mediana edad mientras sostenía el collar.

El hombre de mediana edad tenía la cara llena de barba y el cuerpo delgado. Cogió el collar y recitó una maldición. Al cabo de un rato, una energía espiritual gris se transfirió al colgante.

La chica vestida de rojo siguió dando las gracias al hombre de mediana edad y le transfirió dinero al instante. Después, se marchó emocionada.

Wilbur recuperó su energía espiritual y miró a Sammy. Preguntó: "¿Es tu mejor amiga Ria Quinn?".

Sammy se apresuró a contestar: "Sí. Ahora es una cantante de primera, pero yo...".

Wilbur suspiró y preguntó: "Seguro que entonces eran rivales, ¿no?".

Sammy se quedó perplejo antes de responder lentamente: "Estábamos empezando y firmamos con la misma agencia al mismo tiempo. Las cosas nos iban bien a los dos, a mí solo me iba un poco mejor que a ella".

Wilbur dijo con calma: "Eso es. Temía que fueras a eclipsarla, así que se le ocurrió la cruel idea de maldecirte con mala suerte".

"¡Eso es indignante! Es mi mejor amiga. ¿Cómo ha podido hacerme esto?", gritó Sammy mientras se tapaba la cara.

Wilbur dijo: "He visto a innumerables familias volverse unas contra otras por la codicia. Lo que estás viviendo no es nada comparado con eso".