Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 362

Sam se burló y ordenó que llevaran a Tenson de vuelta a la Aldea Anne de inmediato para que alguien pudiera reemplazarlo.

A continuación, Sam consoló y pidió disculpas al dueño del café. Pagó todas las pérdidas sufridas y añadió una enorme suma de dinero antes de prometer que nunca volvería a ocurrir algo así.

El dueño del café se quedó mirando los cien mil dólares de su cuenta.

El café no valía ni cien mil dólares. ¿Qué había pasado?

Por fin dejó escapar un largo suspiro al recordar las palabras de Wilbur.

Debe de ser una persona increíble.

...

Era de noche cuando Wilbur y Skyler regresaron a la Isla Lago Marino.

Lo primero que hizo Wilbur al volver fue buscar un espacio vacío en el bosque de bambú. Entonces, sacó el trozo de tierra con la savia espiritual de su semiplano y lo plantó en el espacio vacío, con el árbol llameante y la savia espiritual en el centro.

La savia espiritual se conservó perfectamente, filtrándose lentamente en el jardín.

Faron, Elsa, Faye e incluso Ryder se habían acercado mientras Wilbur trabajaba, contemplando asombrados el espectáculo que tenían ante sí.

Cuando Wilbur terminó por fin, un aroma refrescante llenó el aire.

"¿Qué es ese olor? ¡Es exquisito!", se maravilló Faye.

Wilbur sonrió con suficiencia. "Lo mejor. Son plantas espirituales antiguas y savia espiritual que producen un aura espiritual que puedes usar para cultivar".

Wilbur rio entre dientes.

Este nuevo trozo de tierra espiritual era muy beneficioso para todos en la Isla Lago Marino, así como para él mismo, y tenían que agradecérselo a Skyler. Wilbur tampoco tenía intención de echarlo.

Era incluso mejor que se ofreciera voluntario para quedarse, pero nadie sabía de dónde venía Skyler, así que la huella espiritual tendría que quedarse para que siguiera bajo el control de Wilbur en caso de que ocurriera algo.

Wilbur les presentó a Skyler a todos y también le reveló la identidad de todos.

La mandíbula de Skyler casi se cae al suelo después de oír aquello. Parecía que todo el mundo en esta isla tenía un origen extraordinario.

Wilbur dijo entonces: "También hay algo más".

Todos se volvieron para mirarlo.