Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 419

Este era el movimiento más poderoso de Maníaco, uno que condensaba toda su energía del aura, fuerza y voluntad.

Sus ojos estaban completamente inyectados en sangre cuando ejecutó este movimiento. Se volvió feroz como un tigre salvaje suelto.

Había perdido completamente la cabeza en ese momento. Lo único en lo que podía pensar era en derribar al oponente que tenía delante, sin importarle los obstáculos que se interpusieran en su camino.

Nada se interpondría entre Maníaco y su oponente hasta que este estuviera muerto.

Wilbur se limitó a sonreír mientras extendía lentamente la mano izquierda.

Un golpe resonó en el aire.

Wilbur sostenía el golpe más poderoso de Maníaco, justo en la palma de su mano.

El aura del tigre se desintegró de golpe mientras Maníaco miraba a Wilbur con incredulidad. Luchó con todas sus fuerzas, pero no pudo zafarse de su agarre.

Justo entonces, Wilbur le dio una patada en el vientre.

Maníaco salió volando por los aires y aterrizó pesadamente en el suelo.

Inmediatamente, se puso en pie, sin darse cuenta de la sangre que le goteaba de la boca, mientras cargaba de nuevo contra Wilbur. Sus puños se agitaban salvajemente en ese momento.

A Maníaco no le quedaban muchas fuerzas. Sin embargo, eso no le importaba, pues siguió atacando sin pensar.

Wilbur soltó una risita. Presionó a Maníaco contra el suelo, asestándole una serie de puñetazos y patadas.

No pasó mucho tiempo antes de que Maníaco se pusiera azul y negro, aullando de dolor.

Finalmente, Wilbur se detuvo y se metió las manos en los bolsillos mientras lo miraba fijamente.

Por fin, los gritos de dolor de Maníaco se desvanecieron. Se puso en pie e intentó una vez más abalanzarse sobre Wilbur a pesar de las magulladuras que estropeaban su cuerpo.

Sin embargo, esta vez no tuvo fuerzas para levantar los brazos y se limitó a abrir la boca para intentar morder a Wilbur.