Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 512

Shelby se apresuró a llamar también a Wilbur.

"Wilbur, ¿estás bien?", dijo Shelby apresuradamente en cuanto se conectó la llamada.

"Estoy bien. No tienes por qué preocuparte. Soy amigo del dueño del local, así que lo hablamos y nos fuimos a casa".

Shelby soltó un suspiro de alivio. "Menos mal. Me preocupaba tanto que pudiera pasarte algo. No sabría qué decirle a mi hermano si eso ocurriera".

"Todo está bien, Shelby. Soy más que capaz de manejar algo así. Por favor, no dudes en llamarme en el futuro si te pasa algo más".

"De acuerdo. Muchas gracias, Wilbur. Me alegro de que estés bien".

"Por supuesto. Adiós entonces".

"Adiós".

Shelby colgó la llamada, la confusión aún persistía en su cabeza.

Parecía que su hermano había dicho la verdad. Wilbur era realmente poderoso. Pero, ¿por qué Ethan no había dicho nada sobre el trabajo de Wilbur?

En ese momento, Whitney entró en el dormitorio con aspecto desolado.

Celine le preguntó: "¿Ha pasado algo?".

"No puedo contactarlo. Ha apagado el teléfono", dijo Whitney sacudiendo la cabeza.

Yasmine dijo: "¿Podría haber pasado algo?".

"El señor Willis es un VIP del karaoke. ¿Qué podría pasarle? Me preocupa que le moleste lo que acaba de hacer Wilbur y no podamos llevarnos tan bien en el futuro", dijo Whitney, mirando a Shelby.

Shelby soltó un suspiro, se metió en la cama y sacó un libro para leer.

Se le había subido la falda lápiz, dejando al descubierto una tira de encaje debajo. El cuello de la camisa también se había caído hacia un lado, dejando al descubierto una gran porción de piel lisa y reluciente.

"Oh, Dios mío". Wilbur cogió la manta más cercana y cubrió a Faye con ella de inmediato.

A decir verdad, Faye era una verdadera belleza tanto por dentro como por fuera.

Cualquiera se sentiría tentado por su aspecto y Wilbur no era una excepción.

Sabía que Faye no rechazaría sus avances siempre y cuando él se los propusiera.

En ese momento, Faye abrió los ojos. Wilbur entró en su campo de visión y ella se acurrucó en sus brazos. "Mmm, ¿por qué has tardado tanto?".

Su aroma llegó a las fosas nasales de Wilbur mientras su calor le oprimía el cuerpo, haciendo que Wilbur empezara a sudar de inmediato.

Hasta el día de hoy seguía siendo virgen y tocar a una mujer así por primera vez le daba pánico.