Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 576

Inesperadamente, aquellas personas cayeron de rodillas y empezaron a postrarse ante Wilbur, murmurando algo sobre que Wilbur era el verdadero inmortal enviado a este mundo para derrotar al mal.

Wilbur los miró y suspiró. Se acercó a Booker y le dijo fríamente: "Ya estoy libre. Hablemos".

"¡Señor, quiero decir, maestro! ¡Por favor, perdóneme! Estaba ciego. No sabía lo grandioso que era usted. ¡No lo merezco!".

Booker estaba completamente aterrorizado, abofeteándose a sí mismo mientras hablaba. Después de unas cuantas veces, tenía la cara hinchada de sus propias bofetadas.

El resto de sus subordinados estaban fuera de sí, incrédulos. Nunca se habían encontrado con un zombi.

Para empeorar las cosas, este hombre de pie delante de ellos diezmó completamente a los zombis con un solo puñetazo y para colmo, el último zombi era realmente aterrador. Solo con el aura que desprendía ya casi perdían el conocimiento, y mucho menos por el terrible aspecto que tenía. Pensaron que se habían topado con un demonio que estaba allí para quitarles la vida.

Sin embargo, a pesar de lo poderoso que era ese zombi, fue abatido de un puñetazo por este hombre. Se podía ver lo poderoso que era.

Era imposible que fuera un simple mortal. ¡Debe ser una especie de inmortal!

Pensar que realmente pensaron en chantajear a este tipo antes. Fue realmente un movimiento estúpido.

Al ver que Booker y sus subordinados temblaban de miedo, Wilbur se burló y dijo: "Vuelve y arregla la tumba de la familia de Yanfren. En cuanto a ti, renuncia a tu puesto de secretario del pueblo y trabaja en un empleo adecuado. De lo contrario, alguien vendrá a ocuparse de ti aunque yo no lo haga".

"Sí, dimitiré y me dedicaré a la agricultura. Haré lo que usted diga, maestro". En ese momento, Booker haría cualquier cosa que Wilbur dijera con tal de conservar su vida.

Wilbur miró a Ryder y Yanfren, y luego dijo: "Vámonos".

Los dos asintieron y subieron al coche. Con Ryder como conductor, los tres volvieron a la Ciudad Seecher.

Yanfren estaba emocionado y miraba a Wilbur con admiración en los ojos.

Mientras tanto, en las montañas de la provincia de Río Oeste, un anciano de aspecto arrugado abrió los ojos de repente y se levantó. Miró al cielo con rabia.

Después de un momento, gritó furioso: "¡Bastardo! ¿Cómo te atreves a matar a mi discípulo y destruir su alma? ¡Te convertiré en un zombi y te someteré a un tormento eterno!".

El furioso grito del anciano fue como un trueno, rodando por las montañas y espantando a todos los animales de su interior.

En su mente, podía ver la imagen del alma de su discípulo siendo golpeado por un rayo de luz plateada, diezmándolo.

Aunque no podía distinguir la apariencia de la persona que mató a su discípulo, podía decir que el asesino era al menos un cultivador de nivel máximo Ambiente o tal vez incluso un cultivador de nivel previo al Santuario. Había una posibilidad de que fuera incluso más fuerte que eso.

Sin embargo, como cultivador de nivel Santuario de la provincia de Río Oeste desde hacía mucho tiempo, era imposible que fuera sagrado.

El anciano se burló, luego cruzó 100 metros con un solo paso, dirigiéndose montaña abajo.