Resumo de Capítulo 606 – Uma virada em Viviendo con Mi Jefa Esposa de Internet
Capítulo 606 mergulha o leitor em uma jornada emocional dentro do universo de Viviendo con Mi Jefa Esposa, escrito por Internet. Com traços marcantes da literatura Urbano, este capítulo oferece um equilíbrio entre sentimento, tensão e revelações. Ideal para quem busca profundidade narrativa e conexões humanas reais.
Todos los presentes se quedaron boquiabiertos ante las palabras de Wilbur.
¿Este hombre estaba loco? Tenía ganas de morir, hablándole así a Justin en Ciudad Águila.
A Justin lo tomó desprevenido un segundo, y luego se echó a reír mientras sacudía la cabeza. "Está bien, está bien. Es la primera vez que conozco a alguien tan engreído como tú. Realmente crees que eres el mejor del mundo solo porque eres un buen luchador, ¿eh?".
"Yo no me llamaría el mejor del mundo, pero sin duda puedo ocuparme de ti". Wilbur no retrocedió en absoluto ante el hijo del mandamás de Ciudad Águila, y sus palabras sorprendieron aún más a todos.
La expresión de Justin se ensombreció y se volvió hacia los dos musculosos guardias que tenía detrás. "Vayan por él".
Los dos hombres se acercaron a Wilbur, rebosantes de una aterradora energía espiritual que llenó toda la sala.
Eran cultivadores de nivel máximo de Ambiente, mucho más fuertes que los tres guardaespaldas de hace un momento.
En la mano de uno de ellos apareció una espada larga, cuya hoja rugió con las llamas espirituales mientras acuchillaba y apuñalaba sin piedad a Wilbur.
Dos dagas aparecieron en las manos del otro hombre, que lanzó una serie de ataques contra Wilbur. Las dagas constreñían el aire mientras se balanceaban hacia abajo, moviéndose con rapidez y apenas visibles a simple vista.
Toda la sala se llenó a la vez de energía espiritual desenfrenada, haciendo que la multitud se sintiera sofocada mientras el sudor se acumulaba en sus frentes.
La expresión de Asher era positivamente asesina.
Si Wilbur no moría hoy, la familia Yves estaría acabada. No importaba quién fuera Wilbur, seguramente caería.
No había nada de lo que Justin Yaegar no pudiera ocuparse en Ciudad Águila, así que eso no le preocupaba.
El resto de los miembros de la familia Yves prácticamente rezaban por la muerte de Wilbur para que la furia de Justin terminara de una vez y se salvaran.
Faye estaba ligeramente preocupada y Fabian sonreía para sí mismo.
Justo en ese momento, todos los presentes suspiraban para sus adentros. Dejando a un lado las habilidades de Wilbur, ir contra Justin Yaegar era un boleto de ida al infierno.
¿Qué tonta fue Faye al meter a su familia en problemas por eso? ¿En qué estaría pensando?
Ambos sangraban por todas partes, con el pecho agitado mientras miraban aterrorizados a Wilbur.
Alguien tan poderoso como para derrotarlos tan fácilmente estaba sin duda en el nivel Santuario.
Si ese era el caso, cualquiera por debajo del nivel del Santuario no tendría ninguna oportunidad contra él.
El resto de la sala se quedó sin palabras. Esos dos hombres eran los guardaespaldas de Justin. ¿Wilbur estaba loco, atacándolos así?
Finalmente, Justin perdió los estribos, golpeó la mesa mientras se ponía en pie y gritaba: "¡Cabrón! Realmente estás pidiendo morir".
"Ven aquí".
Wilbur alargó la mano para agarrar a Justin de un movimiento y levantarlo por los aires.
El resto de la sala se alborotó. Todos se pusieron en pie, mirando aterrorizados a Wilbur.
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