Viviendo con Mi Jefa Esposa romance Capítulo 901

Wilbur no entendía qué problema tenían esos tipos con él.

Justo entonces, otro tipo dijo: "Lo que más odio son los cabrones incultos como tú, que intentan hacerse pasar por todo eso solo porque han ganado ese poco de dinero. Apuesto a que vas a volver a presumir después de esto".

"Incluso si fuera inculto, ¿por qué es de tu incumbencia?", preguntó Wilbur.

"Simplemente odio a la gente de clase baja como tú, sin cultura. ¿Qué vas a hacer al respecto?", se mofó el hombre.

La expresión de Wilbur se ensombreció, pero Tiff se apresuró a decir: "¿Por qué no volvemos ya, señor? Estas fichas se me están haciendo muy pesadas de cargar".

Wilbur se burló y se dio la vuelta para marcharse mientras Tiff iba detrás de él.

"Ja, sabía que no había mucho más para un idiota como ese. Vamos, sentémonos a jugar", dijo el hombre mientras hacía un gesto con la mano a sus amigos.

Tiff y Wilbur volvieron a su habitación.

Tiff puso las fichas sobre la mesa con una sonrisa. "Tiene usted la mejor suerte que he visto hasta ahora, señor Penn".

"Bueno, es pura suerte", dijo Wilbur.

Cogió una ficha por valor de cien mil dólares y se la entregó a Tiff. "Esto es para ti".

Tiff se quedó de piedra.

A menudo recibía propinas de sus clientes y los que habían ganado solían ser bastante generosos.

Sin embargo, se trataba de una gran propina, mucho más de lo que podría ganar en unos meses.

Tiff miró a Wilbur con incredulidad. "S-Señor, yo no ofrezco ese tipo de servicio".

"Por supuesto, puedo conseguirle a otra si lo necesita", añadió nerviosa al cabo de un momento.

Wilbur la miró exasperado.

"¿En qué estabas pensando? Eso es solo el pago por todo lo que has hecho. Ya puedes irte".

"¿En serio?". Tiff apenas podía creer lo que oía.

¡Era nada menos que cien mil dólares!

La razón era que Christopher lo había traicionado.

Wilbur lo entendía muy bien.

Stiles era el jefe del círculo clandestino de Aroma y Christopher era considerado su mano derecha.

Aunque Christopher ya estaba en el nivel Santuario, esto demostraba que Stiles también lo estaba.

De lo contrario, Christopher no habría sido tan obediente.

También por eso había confiado tanto en apostar diez mil millones de dólares, así como la vida de Christopher.

Además de eso, Christopher también había dicho que todos en el círculo de cultivadores de Aroma y los dueños del casino también estarían viendo este duelo.

De hecho, ya habían empezado a apostar.

Wilbur no pudo evitar reírse al pensar en ello.

Esta era realmente una tierra donde se podía apostar por casi todo.