Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1051

Sotiria era responsable de Naomi ahora.

Sotiria no iba a recurrir a una pelea en la que iba a perder si o si con Lorraine ahora. Ella tenía que exponer a Lorraine y hacer que Lorraine pagara por lo que había hecho sin hacerse daño..

¡Clac!

La puerta de la sala se abrió.

Garrison entró en la sala con una caja de condones y vio a Sotiria tirada en el suelo, rígida. Su rostro radiante se llenó instantáneamente de pánico y angustia.

“Tiria, ¿qué te pasó?”.

Él corrió hacia ella y la levantó con cuidado.

Sotiria miró con frialdad su apuesto rostro, curvando con frialdad las comisuras de sus labios.

“Me resbalé y me caí por accidente. Sin embargo, la caída me hizo bien. Siento como si hubiera regresado de la muerte”.

“Tiria, ¿tuviste una mala caída? ¿La caída te revolvió la cabeza?”.

Los hermosos y grandes ojos de Garrison se llenaron de ansiedad cuando vio su rostro sin emociones y la mirada fría en sus ojos.

“¡Ah! Tiria, tu nariz está sangrando. Mírate. Te dije que me esperaras en la cama. ¿Por qué te levantaste de la cama para andar por ahí? No te muevas, no hables, trata de contener la respiración, te ayudaré a detener el sangrado”.

Él levantó su mano derecha para pellizcar la nariz de Sotiria.

Sotiria, sin embargo, apartó tranquilamente su mano. Ella bajó los ojos y miró la caja de condones en su mano con una mirada extraña y enigmática en sus ojos.

“¿No estabas ansioso por consumar nuestro matrimonio? Ya compraste los condones. ¿No quieres tener sexo conmigo?”.

“¡Tiria!”. Garrison se sintió aún más ansioso cuando ella dijo eso.

“Puede que haya estado soñando con consumar nuestro matrimonio, pero ¿qué tipo de persona crees que soy? Has perdido el juicio por tu caída y estás diciendo tonterías. ¿Cómo podría pensar en eso? Tiria, deja de hablar. Te llevaré al hospital de inmediato…”.

Él sabía que Charlotte recuperaría sus recuerdos algún día, y sabía que tarde o temprano tendría que enfrentar este día.

Sin embargo, ¡nunca pensó que este momento llegaría tan pronto y tan repentinamente!

Sus brazos gradualmente perdieron fuerza mientras sostenía a Charlotte en sus brazos. Charlotte aprovechó esta oportunidad y se alejó de él. Ella se paró a un pie de él, mirándolo con desdén.

“¿Qué ocurre, Garrison? Eras tan bueno tranquilizándome antes de que recuperara mis recuerdos. También tenías mucha labia, ¿no? ¿eh? ¿Qué ocurre? ¿Por qué no dices nada?”.

“Tiria… ¡No! Carlie…”.

Garrison se calmó un rato antes de poder hablar de nuevo.

La mirada en sus ojos mientras miraba a Charlotte seguía siendo tan amorosa y cálida como siempre.

“Sabía que este momento llegaría, tarde o temprano. Y también sabía que me odiarías una vez que recuperaras tus recuerdos. No me explicaré. Todo lo hice por mi amor a ti. ¡Sé que he cometido un error, pero nunca me sentiré culpable por engañarte a que te casaras conmigo! Porque me prometiste hace diez años que, si te esperaba en los Puentes Arcoíris por diez años, te casarías conmigo. Fui fiel a esa promesa, y lo sabes. Te he estado esperando en los Puentes Arcoíris estos diez años. Tu matrimonio conmigo es lo que me merezco”.