Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1101

Después de cuatro años, su cuerpo se veía más o menos igual. Era tan perfecto como su rostro, verlo hizo que no pudiera apartar la mirada.

“No estás vestida. ¿También querías darte una ducha?”.

Su voz clara y magnética volvió a sonar fuerte.

“¡Ah!”.

Solo entonces se dio cuenta de que había caminado hacia el baño para tomar una ducha desnuda, pensando que Zachary ya se había ido…

“Así es. Pero no tenía idea de que estabas en el baño, así que… Eh… Adelante. Me bañaré más tarde”, ella murmuró incoherentemente, luego se dio la vuelta para irse.

Sin embargo, Zachary, que caminaba con pasos largos, llegó a la puerta de un solo paso. Antes de que pudiera cerrar la puerta, él envolvió su brazo alrededor de su delicada cintura y la atrajo hacia sus brazos.

“Yo ya terminé. Puedes hacerlo ahora”.

Charlotte tembló y se sonrojó como si todo su rostro estuviera en llamas.

Zachary abrió sus delgados labios, su voz magnética y su cálido aliento rozaron su rostro ardiente. “¿Quieres que te ayude?”.

“No es necesario…”. Charlotte, cuyo corazón estaba saltando como un ciervo, no tenía idea de cómo logró responderle. Ella empujó su pecho con sus suaves manos blancas. “Si ya terminaste, puedes irte. Puedo hacerlo yo— Mmm…”.

Zachary la besó en los labios y la empujó contra la pared. Los brazos fuertes como el hierro de Zachary se envolvieron alrededor de su cintura y la levantaron.

Un calor apasionado surgió en el baño como una marea.

…

Lorraine se quedó despierta toda la noche, incapaz de conciliar el sueño.

Había estado pensando en Charlotte toda la noche. Cada vez que pensaba en ella, apretaba los dientes con odio. Al mismo tiempo, lamentó no haber escuchado a Jebediah. ¡Debió haber matado a Charlotte en el momento en que se dio cuenta de que se estaba haciendo pasar por Sotiria!

Lorraine se levantó de la cama, retorciéndose de odio. Salió del baño y miró las ventanas francesas del gran salón, como de costumbre.

Sin embargo, Zachary, quien normalmente estaría haciendo su lectura matutina frente a las ventanas francesas a esta hora, no estaba allí hoy.

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