Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1119

Charlotte apartó la mirada del rostro de Virginia y le sonrió levemente a Renata. “Gracias”.

Mientras se secaba el cabello, Renata la miró significativamente. “Escuché rumores de que tu memoria se ha recuperado, ¿es verdad?”.

Charlotte asintió. “Sí”.

“Entonces, déjame hacerte una pregunta…”. Había un rastro de tristeza en los ojos de Renata. “Me quedé a tu lado durante más de cuatro años después de que perdiste la memoria. Aunque me mantuve cerca tuyo por otros motivos, puedo sentir que eres una persona muy amable en el fondo. Sin embargo, hiciste muchas cosas increíbles en ese entonces…”.

“¡Tiria! Siempre he querido preguntarte. Yo era tu única amiga en ese entonces, y claramente sabías que amaba mucho a Frank. Incluso nos comprometimos y compramos una casa conyugal juntos. ¿Por qué lo sedujiste y nos separaste?”.

“Pues…”. Charlotte frunció los labios con incomodidad, luego suspiró. “Rena, de hecho, ni siquiera yo sé por qué”.

Renata se sobresaltó un poco. “¿Cómo es eso posible? ¿No sabes la razón detrás de por qué lo hiciste?”.

“Hay algunas cosas que no puedo decirte todavía, pero te prometo que no te estoy mintiendo. En realidad, no soy la persona que hizo esas cosas”.

Charlotte, que ya se había secado el cabello, le devolvió la toalla a Renata y la miró seriamente. “Pero, si quieres saber mi opinión, si un hombre realmente te ama, no te traicionaría sin importar cómo otras mujeres intenten seducirlo. Además, Frank había decidido casarse contigo en ese momento, pero aun así eligió besar a otra mujer en la casa que ambos compartían en la víspera del día de su boda. Esto solo demuestra que él no te amaba en absoluto. Un hombre así no es digno de tu amor”.

Los ojos de Renata se veían tristes.

'¡Sí! También pensé que podría haberme enamorado del hombre equivocado antes de esto. Tal vez Frank no me amaba tanto como yo pensaba'.

“Vi, ¿qué sucedió? ¿Por qué te ves tan pálida? ¡¿Por qué te están arrestando?!”.

Virginia, que ya estaba devastada, lo miró aturdida y no pronunció una sola palabra.

Harvey miró a los dos policías que escoltaban a Virginia esposada. “¿Por qué Vi está tan asustada? ¿Qué le hicieron?”.

Los policías sacudieron la cabeza. “Señor Green, está haciendo la pregunta equivocada. Debería preguntarnos qué ha hecho ella y por qué está tan deprimida después de ser detenida”.

Un sentimiento ominoso se precipitó en el corazón de Harvey cuando sus cejas se fruncieron. “Vi… ¿Qué hizo ella…?”.