Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1195

Una foto fue golpeada contra la ventana de su coche.

“Señorita Allegra, la amamos. Por favor, deme su autógrafo”.

Charlotte se quedó mirando la foto.

Era una fotografía de La Primera Princesa Hechicera, la película que había filmado hace cuatro años. En ese momento, tenía un rostro hermoso e impecable, muy distinto de su rostro actual.

Fue en ese momento que Charlotte se dio cuenta de que todas esas personas eran fanáticos de su película. No tenían ninguna intención maliciosa hacia ella en absoluto…

Ahora que se sentía más relajada, finalmente respiró hondo y salió del coche.

“¡Allegra!”.

“¡La amamos!”.

Justo cuando salió del coche, los fanáticos la rodearon locamente, acercándose a ella, sosteniendo su foto en sus manos.

“Señorita Allegra, la amamos en La Primera Princesa Hechicera, ¡y también la amamos mucho! Pero pensamos que murió hace cuatro años y lloramos hasta el punto de casi cegarnos… Todos somos fanáticos extremadamente devotos de su película y de usted. Nos llenamos de alegría cuando descubrimos que todavía estaba viva. ¡Debe darnos su autógrafo!”.

“Señorita Allegra, la amo mucho, mucho. ¡Por favor deme su autógrafo!”.

La mitad de estas personas eran estudiantes. Lloraron y aclamaron, algunos empezaron a sollozar.

Prácticamente todas las ventanas del complejo residencial estaban abiertas y las cabezas se asomaban por las ventanas mientras miraban fijamente esta increíble escena.

Charlotte estaba feliz, sorprendida y nerviosa. Ella hizo todo lo posible por mantener la calma.

Lorraine la había llevado a un callejón sin salida en ese entonces. Como tal, rápidamente terminó de filmar La Primera Princesa Hechicera. Antes de que la película se estrenara en los cines, se apresuró a acabar con Lorraine.

Charlotte no debería haber tenido que pasar por eso.

Debería haber sido famosa, como una perla deslumbrante, adorada y alabada por sus fanáticos.

¡Ahora, era hora de que ella realmente regresara y recuperara todo lo que le pertenecía!

'Pero…'.

Ella miró la cara en su espejo retrovisor, una cara que pertenecía a otra persona y luego recordó su cara original…

'¡No! ¡Si voy a ser yo misma, voy a ser yo misma, de principio a fin! ¡Quiero recuperar mi verdadero rostro!'.