Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1215

Zachary abrió la puerta del coche junto a ella.

Parado afuera del coche, Zachary miró con frialdad a Lorraine, que estaba al borde del acantilado. Su voz clara se sentía como una brisa fría soplando desde la cima de una montaña cubierta de nieve. Él sonaba frío y despiadado. “¿No tienes algo que preguntarle?”.

Charlotte se quedó sin palabras por un momento cuando las comisuras de sus labios se torcieron. “Sí…”.

Luego salió del coche y caminó directamente hacia Lorraine.

“¡Señora, espere un momento!”. Lucas trotó dos pasos hacia adelante y le bloqueó el camino. “Escuché sobre las cosas que la Señorita Larson le hizo. Ella no es digna de ninguna simpatía y piedad. Sin embargo, Señora, todavía le aconsejo que se calme. Después de todo, usted no es una asesina, ¿cierto?”.

Charlotte levantó las cejas, revelando sus ojos despiadados. “Entonces, ¿te preocupa que la mate?”.

Lucas asintió con impotencia.

Un rastro de burla y autodesprecio se reveló en las comisuras de los labios de Charlotte. “¡Mira! Luke, incluso un transeúnte como tú lo puede ver. Esto solo demuestra que lo que ella me ha hecho es suficiente para obligar a alguien como yo a matarla. Entonces, no sería un pecado si yo la mato, ¿no crees?”.

“Pues…”. Lucas se quedó sin palabras por un momento.

Charlotte pasó junto a él y siguió caminando hacia Lorraine.

En ese momento, Lorraine, que estaba arrodillada en el suelo, también vio a Charlotte. Tenía los ojos abiertos de par en par y dejó escapar unos gritos ahogados e hizo un montón de sonidos inaudibles e irreconocibles.

Charlotte se acercó a ella y le arrancó la cinta de la boca.

“¡Ah!”. El dolor hizo que Lorraine soltara un grito. La cinta era tan pegajosa que la piel de sus labios se desgarró y la sangre brotó de inmediato.

Zachary no tenía expresión. “Sí”.

Las comisuras de los labios de Lorraine se torcieron y no pudo pronunciar nada por un tiempo.

Las lágrimas rodaron en silencio por sus mejillas y por las comisuras de sus labios demacrados antes de mezclarse con su sangre carmesí, formando ríos de lágrimas sangrientas.

Charlotte abrió la boca con frialdad. “Sé que lo hiciste. Dime ahora, ¿dónde escondiste a Poopoo esta vez? Te perdonaré la vida si me lo dices”.

“¿En serio? ¿Cómo lo sabes?”. Lorraine, que estaba tan desesperada que tuvo un colapso mental total, se rio a carcajadas.

Su mirada solo se quedó en el rostro de Charlotte por un breve momento, y luego volteó al rostro de Zachary. “Zachary, Carlie ha determinado que fui yo quien lo hizo. Ahora dime, ¿a quién le creerías si te dijera que soy inocente?”.