Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1353

La voz del Rey de la Noche era escalofriante a pesar del ambiente caluroso y sofocante en el estacionamiento.

Los labios de Tiffany temblaron y no pudo decir una palabra.

El Rey de la Noche le sonrió. “Recuerda, nunca hago nada que no me genere ganancias. Si quieres que te haga famosa, tendrás que mostrar tu sinceridad brindándome beneficios. De lo contrario, eres inútil para mí. ¿Por qué debería hacer famosa a una mujer inútil?”.

Él se dio la vuelta en silencio tan pronto como dijo esto.

Solo entonces Charlotte vio que una figura alta y oscura se alejaba lentamente.

Tiffany miró su figura oscura con aturdimiento. Le tomó tres segundos calmarse antes de recuperar su voz. “Siento como si nos hubiéramos conocido antes. ¿Quién eres?”.

“No necesitas saber quién soy ahora mismo, pero algún día lo sabrás. Te daré un día para considerar mi oferta. Dame una respuesta mañana a más tardar”.

La voz se desvaneció gradualmente. La figura del Rey de la Noche se alejó lentamente y pronto desapareció.

Tiffany se quedó aturdida frente al coche de Charlotte durante mucho tiempo, como una marioneta, antes de irse.

Charlotte esperó a que Tiffany saliera del estacionamiento antes de encender su motor. Estaba completamente inquieta mientras conducía de regreso a casa. Un par de veces casi se choca con otros coches y se pasó una luz roja una vez.

'Jezabel, Bryson, Tiffany…'.

“Jeje… Tengo trabajo que atender, Señorita. No interrumpiré su tiempo con el Señor Rey de la Noche. Por favor, vaya a hablar con él”. El Señor Gold le hizo una reverencia a Charlotte y se fue rápidamente.

Charlotte avanzó unos pasos hacia Bryson. “¿Necesitas algo?”.

El hombre tenía una máscara sobre su rostro, tan oscura como el cielo nocturno. Sin embargo, sus ojos brillaban como estrellas al mirar a Charlotte. “Sé que escuchaste mi conversación con Tiffany en el estacionamiento”.

Charlotte jadeó. Luego, forzó una sonrisa firme y respondió: “Sí, estaba en mi coche… pero no era mi intención. Tiffany caminó hasta mi coche, ¡así que no pude evitarlo!”.

Bryson se quedó mirando su sonrisa, que parecía una flor, y se distrajo momentáneamente. Sin embargo, como el Rey de la Noche, se había acostumbrado hace mucho tiempo a no mostrar ninguna emoción. Él mantuvo una fachada fría e indiferente. “Ya que escuchaste mi conversación con Tiffany, me gustaría pedirte ayuda”.