Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 1354

Los ojos claros de Charlotte parecían sonreír.

“Dime”.

Bryson permaneció en la oscuridad, sus ojos cubiertos de una leve capa de tristeza. “Me gustaría que actúes para mí”.

“¿Qué?”. Charlotte sacudió la cabeza. “Bryson, sabes que estoy filmando la secuela de La Primera Princesa Hechicera en Mundo Virtual. No puedo aceptar ningún otro papel hasta que termine este”.

“Eso no es lo que quise decir”. Bryson, quien siempre se retrató a sí mismo como el oscuro Rey de la Noche, curvó los labios en una floreciente sonrisa. “Hice arreglos para que una mujer vaya a tu estudio mañana. Ella se acercará a ti mientras estás en el estudio. Una vez que eso suceda, tú y esa mujer se acercarán deliberadamente a Tiffany. Sigue el contenido de este documento y ten una conversación con esta mujer. Tienes que dejar que Tiffany te escuche”.

Él le entregó a Charlotte una hoja de papel.

Charlotte la aceptó. La iluminación era tenue, por lo que todo lo que podía ver era una nota larga con muchas palabras. No podía leerlo.

Charlotte dobló el papel y lo guardó en su bolsillo. Luego, ella dijo: “¿Por qué quieres que haga esto?”.

Bryson era una cabeza más alto que Charlotte. Él bajó la cabeza y la miró. “Escuchaste nuestra conversación en el estacionamiento. Quiero hacer un trato con ella, y ella se niega por el momento. Ella lo hará una vez que hagas tu parte”.

“Je… No creo que conozcas a las mujeres lo suficientemente bien…”.

Charlotte sacudió la cabeza con desdén.

“Déjame explicarte, Bryson. Cuando una mujer encuentra a un hombre al que realmente ama, se entregará a ese hombre. Tiffany está verdaderamente enamorada de Zenios. Ella es la esposa de Zenios ahora. Ninguna amenaza funcionará con ella”.

Bryson levantó una ceja. “Entonces… ¿Qué tal si hacemos una apuesta?”.

“¿Qué tipo de apuesta?”. Charlotte frunció el ceño.

Charlotte asintió con indiferencia. Entonces, inmediatamente se dio cuenta de que algo no andaba bien y se levantó del sofá antes de darse la vuelta y mirar al Señor Gold.

“Señor Gold, ¿escuchaste mi conversación con Bryson? ¿Cómo sabes de lo que estábamos hablando?”.

“Jejeje…”. El Señor Gold se rio incómodamente. “Lo siento mucho, Señorita. No sé qué me sucede. La curiosidad de uno aumenta con la edad. Planeaba mantenerme al margen para que pudiera tener una conversación privada con el Señor Harper, pero tenía demasiada curiosidad por saber de qué estaban hablando. Después de dar unos pasos, sentí que estaba clavado aquí. No pude irme, así que… ¡Uff! ¡Lo siento, Señorita! ¡Lo siento mucho! Nunca lo volveré a hacer”.

Charlotte no era una persona mezquina. Ella solo hizo un gesto con su mano.

“Está bien, te la dejaré pasar esta vez. La próxima vez, no husmees en mis conversaciones privadas”.

“Gracias”. El Señor Gold se inclinó ante Charlotte.