Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 152

Los sirvientes habían preparado el desayuno.

Charlotte y Zachary llevaban casados ​​más de un mes y solo habían comido en la misma mesa unas pocas veces. Zachary comía con naturalidad, pero debido a su temperamento frío y majestuoso, Charlotte todavía se sentía muy estresada.

Por lo tanto, Charlotte solo tomó unos pocos bocados antes de dejar los cubiertos y se fue a toda prisa.

“¿Adónde vas?”, preguntó Zachary con tranquilidad.

Charlotte respondió con una sonrisa: “A mi estudio”.

Después de hablar, sintió que su respuesta a Zachary sonó muy grosera, prácticamente dejando la conversación en un punto incómodo, por lo que ella añadió: “Pintar es lo que hago y ese estudio es donde trabajo. Así que de ahora en adelante, si no hay circunstancias excepcionales, iré a mi estudio a pintar y vender mis pinturas, ¿está bien?”.

Zachary parecía indiferente. “Sí”.

Charlotte exhaló un suspiro de alivio.

Antes de esto, le preocupaba que Zachary, el presidente del legendario Grupo Hathaway, despreciara su profesión de pintora común y no la dejara pintar más.

Parecía que a Zachary no le importaba la ocupación de su esposa, por lo que ella estaba aliviada.

“Oh, sí, mi estudio fue renovado por completo después del incidente, y todo el lugar se ve mucho más lujoso ahora. Creo que debes ser tú quien me ayudó con la remodelación, así que gracias”.

El apuesto Zachary respondió: “Para ser precisos, la persona que te ayudó a renovar todo el lugar fue el equipo de renovación de mi compañía, no yo”.

'¿¡Qué!? Esto… ¿Hay alguna diferencia?'. Charlotte estaba obviamente sorprendida.

Charlotte llegó al estudio, sacó la llave de su bolso y estaba a punto de abrir la puerta cuando recibió una palmada en el hombro.

“¡Por fin estás aquí, Carlie!”.

Charlotte se sobresaltó por el susto y su llave cayó al suelo.

Ella no se molestó en levantar la llave y miró al hombre detrás de ella. “Zenios, todavía es muy temprano en la mañana. ¿Así es como le deseas buenos días a alguien?”.

Además, Zenios acababa de salir al público tan descaradamente como una celebridad. ¿No temía que sus fanáticas aparecieran de la nada, lo secuestraran y se lo llevaran de regreso a casa como parte de su colección personal?

“No hay tiempo para preocuparse por eso. ¡Hay cosas mucho más importantes por hacer ahora! ¡Sígueme, Carlie!”.