Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 262

‘¿Por qué tuve que obligar a Zach a someterse al castigo de la familia? ¡Ya sabía lo terco que es! ¡Todo esto es mi culpa!’.

Entonces, Richard levantó su látigo.

Annalita no pudo soportar ver la cruel exhibición. Cerró los ojos en agonía.

Ella acababa de cerrar los ojos cuando escuchó un golpe fuerte.

Se dio la vuelta y vio un Rolls-Royce negro chocando contra la puerta y conduciendo hacia el patio, dirigiéndose directamente hacia donde Zachary.

Todos se sorprendieron.

Incluso Richard bajó el látigo, y se quedó mirando la super armadura soldada a la parte delantera del coche de lujo...

La única razón por la que el coche había logrado atravesar las puertas fue porque tenía una super armadura de grado militar agregada en la parte delantera del coche.

¡Boom!

La puerta del coche se abrió de una patada.

Una figura esbelta y delicada saltó ágilmente del coche.

Miranda se enfureció cuando vio que era Charlotte. “Charlotte Simmons, ¡cómo te atreves! Si te hubieras ido de Rothesay como te pedí, mi hermano no se encontraría en este estado. ¡Míralo! ¡Mira lo que le has hecho!".

Charlotte fijó su mirada en Zachary.

Ella había visto el cuerpo golpeado y magullado de Zachary en el video. Por lo tanto, estaba preparada mentalmente. Sin embargo, verlo en este estado en la vida real se sintió como una gran puñalada en el corazón. La agonía la asfixió.

Zachary, cuyos ojos estaban cerrados, abrió los ojos en ese mismo momento.

Para sorpresa de Charlotte, se dio cuenta de que los ojos oscuros y helados de Zachary no mostraban signos de agonía o miedo, lo que se esperaría de alguien siendo torturado. En cambio, vio un matiz de calidez en sus ojos que nunca antes había visto...

“¡Pff! Igual llegaste justo a tiempo. Mi hermano no necesitará sufrir esta agonía ahora que estás aquí. Es tu culpa que mi hermano haya quedado en este estado. Te voy a atar y a hacerte sufrir los azotes en lugar de mi hermano. Veamos cuántas rondas durarás...".

Hace un momento, se había visto obligada a ver cómo Zachary soportaba una cuarta ronda de azotes. Estaba triste y desesperada. Sin embargo, cuando apareció Charlotte, sintió un rayo de esperanza en su corazón oscuro y lúgubre.

‘¡Charlotte Simmons!’.

Esta mujer, a quien había intentado apartar de la vida de Zachary de todas las formas posibles, se había convertido en su único faro de esperanza durante su momento de necesidad más desesperada e impotente.

"Estás diciendo cosas muy audaces, niña".

Richard se erizó, agitando su látigo.

“¿De verdad crees que cualquiera puede romper las reglas de la familia Connor? Mira cuántos guardaespaldas tenemos. Eres solo una niñita débil. ¿Cómo te atreves a decir estas cosas?".

Charlotte pudo haber planeado todo, pero se sintió un poco aterrorizada al ver al equipo de guardaespaldas, vestidos de negro. Había al menos 200 de ellos.

Richard miró a Charlotte con desdén. “Sin embargo, Mimi está equivocada. Las reglas de la familia Connor solo se aplican a los miembros de nuestra familia. Dado que Zach ha violado las reglas, debido a ti, solo podemos castigarlo a él. Esto no tiene nada que ver contigo. No puedes tomar los azotes de Zach en su lugar. Ya puedes irte. Nadie te detendrá. Sin embargo, ¡no puedes llevártelo!".