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Zachary dio unos pasos grandes con sus largas piernas y, en un abrir y cerrar de ojos, ya estaba junto al sofá.
Victor Rutherford era gordo y tenía forma de huevo. También pesaba más de 180 libras. La fuerza de Zachary era tan poderosa que agarró a Víctor por la ropa y lo levantó lejos de Charlotte antes de tirarlo al suelo.
"Auch…".
Victor quedó atónito por el aura de Zachary. Fue arrojado al suelo boca abajo, y aunque estaba herido y sangrando, no se atrevió a gritar de dolor. Solo podía soportarlo y mirar a Zachary con miedo.
Los dos guardaespaldas quienes sostenían las manos y los pies de Charlotte la soltaron y se quedaron aturdidos. Ni siquiera se atrevían a respirar.
"Dime cuáles son las consecuencias de molestarme".
La voz de Zachary era como un viento soplando desde la cima de una montaña cubierta de nieve, descendiendo sobre Victor con frialdad.
Victor se estremeció de miedo. "Señor Connor, le juro que no lo volveré a hacer en el futuro. ¡Merezco morir! ¡Me lo merezco! Me lo merezco…".
Víctor se arrodilló en el suelo y comenzó a darse bofetadas con ambas manos, una tras otra. Cada vez que lo hacía, utilizaba todas sus fuerzas.
Zachary lo miró con ojos profundos. "Entonces, ¿cómo quieres morir?".
"¡¿Qué?!".
Victor gritó mientras perdía la calma y se ponía de pie con el cuerpo tembloroso. "Señor Connor, por favor, perdóneme. No sé de dónde saqué el coraje para hacer esto, pero en serio no lo haré...".
"Ponte de rodillas".
Zachary interrumpió a Victor con indiferencia.
Victor, quien ni siquiera estaba parado quieto todavía, se arrodilló de inmediato frente a Zachary de nuevo con un ruido sordo. Él levantó su pálido rostro y miró a Zachary como si le estuviera suplicando. Sin el permiso de Zachary, él no se atrevía a decir ni una palabra.
Zachary no lo miró en absoluto. En cambio, miró ligeramente a Charlotte, quien estaba acurrucada en el sofá. "Dijiste que merecías morir antes, pero ahora me estás pidiendo que te perdone la vida. ¿Quieres morir o vivir?".
"¡Vivir! ¡Quiero vivir!", Víctor respondió apresuradamente. "Señor Connor, si me perdona la vida esta vez, estaría dispuesto a hacer cualquier cosa por usted en el futuro".
Zachary se burló: "¿Quién crees que eres?".
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