Amor Adictivo de CEO romance Capítulo 503

“Dame un precio”. La voz clara y melódica de Zachary sonó débilmente.

Lorraine pareció un poco perpleja. “¿Qué quieres decir, Zachary? ¿Qué precio me estás pidiendo?”.

Zachary tenía un rostro inexpresivo y una mirada apática. “Mi esposa perdió la calma y fue demasiado dura contigo, provocando que te lastimaras. Como su esposo, es mi deber compensarlo en su nombre. ¿Cuánto quieres?”.

La voz de Zachary era neutral, pero Lorraine sintió como si un rayo azotara sus oídos. Ella se quedó mirando el rostro que había estado anhelando y encontró su voz después de al menos cinco segundos.

“Ya veo… ¡Estás comprando mi silencio con dinero! Mi hermana causó problemas y te preocupa que presente cargos contra ella, ¡así que me estás comprando!”.

Charlotte tampoco podía creer que Zachary estuviera haciendo esto y desvió la mirada hacia el hombre, deseando confirmarlo.

Había un ceño ligero en el rostro de Zachary mientras palabras apáticas salían de sus labios delgados. “Disputas como esta ocurren en el mundo todos los días. No entiendo por qué estás tan alterada”.

“Zachary, ¿de verdad estás diciendo esto? Realmente piensas que estoy siendo dramática al respecto…”.

Mientras ella miraba el rostro impasible de Zachary con incredulidad, Lorraine nunca se había sentido tan desesperada como ahora en toda su vida.

“El niño en mi barriga que mi hermana mató no era solo mi hijo. ¡También era tuyo! Para mí era más importante que mi vida, y me rompe el corazón perderlo, pero tú… No siento ningún dolor o decepción viniendo de ti. ¡Ni siquiera me has ofrecido una palabra de consuelo, y lo único que te importa es cómo compensarme para que no presente cargos! No quiero hablar de compensación contigo, ¡y crees que estoy siendo dramática!”.

Jebediah también estaba temblando de la ira. Tenía muchas ganas de abofetear a Zachary una vez en cada mejilla y preguntarle por qué era tan cruel con Lory. Sin embargo, estaba tan lleno de rabia que no podía hablar. No era como si pudiera dominar a Zachary si peleaba con él de todos modos.

“Lory, sé más sensata. Estamos discutiendo un precio, no sentimientos. ¿Cómo vamos a continuar si eres tan emocional?”. La voz fría de Zachary habló de nuevo.

Tirando de la muñeca de Charlotte, le indicó que se fueran.

Fue como si una herida se hubiera desgarrado en el corazón de Lorraine cuando vio la gran mano de Zachary sujetando la muñeca de Charlotte. Los celos y el odio interminables se precipitaron fuera de ella como un maremoto mientras su mirada se volvió aguda de inmediato.

“Zachary Connor, ¿cómo pensaste que podrías forzarme a aceptar esto?”.

El hombre se detuvo. Cuando se volteó, su mirada en el rostro de Lorraine ya no era solo fría sino penetrante y helada.

“Si cree que es muy poco, podemos discutirlo”.

“¡No!”.