Amor después del matrimonio romance Capítulo 442

¿Fantasma?

¡Esta mujer realmente pensaba que era un fantasma!

Las comisuras de la boca de Yvonne se curvaron.

Eso tenía sentido porque, a excepción de Henry, todos pensaban que estaba muerta.

Ahora que había aparecido de repente, la reacción de Jacqueline era de esperarse.

Aun así, el que la etiquetaran como un fantasma la hizo sentir muy descontenta.

Yvonne se quitó la capucha y dejó al descubierto su rostro por completo. Era delgada y pálida, y realmente se parecía un poco a un fantasma.

Jacqueline estaba tan asustada que sus piernas se debilitaron y sus labios temblaban. Cuando vio a Yvonne caminando hacia ella, incluso gritó: "Tú... ¡No te acerques! Vete. ¡Vete!".

‘¿Irme?’.

Una luz fría brilló en los ojos de Yvonne y salió al pasillo sin detenerse mientras se acercaba a Jacqueline y hablaba en un tono aterrador, "He vuelto...".

"¡Ahhhhhhhh! No perteneces a la Tierra. Eres un fantasma, deberías ir al infierno".

"¿Infierno?". A Yvonne le irritó esa palabra. Se detuvo frente a Jacqueline y la agarró por el cuello mientras la jalaba con todas sus fuerzas. La miró con ojos rojos. "¿Cómo puedo ir al infierno sola? Si voy al infierno, te llevaré conmigo".

Después de hablar, Yvonne empujó a Jacqueline y entró en el salón.

Jacqueline cayó sobre el mueble de los zapatos y su cara estaba distorsionada por el dolor. Quedó aturdida.

¿Qué había pasado?

¿Los fantasmas podían respirar?

Ella sintió claramente el cálido aliento de Yvonne en su cara y no era como el de un fantasma, sino como una persona viva.

‘Espera... ¿Una persona viva?’.

Cuando Jacqueline se dio cuenta de eso, ya no le importó el dolor en su espalda y el miedo en su corazón. Se levantó con una expresión sombría y persiguió a Yvonne con rabia.

Cuando llegó a la sala de estar, vio a Yvonne de pie en medio del salón de espaldas a ella mientras miraba algo. Jacqueline gritó con fuerza, "Yvonne, así que no estás muerta. ¿Cómo te atreves a fingir ser un fantasma y asustarme?".

¿Ya se había dado cuenta?

Yvonne levantó las cejas y se dio la vuelta lentamente. "No estás muerta, así que ¿cómo voy a morirme primero? Fuiste tú quien me confundió con un fantasma".

"Yo...". Jacqueline se atragantó y su rostro se volvió pálido.

Yvonne resopló y dijo, "¿Y ahora qué, Jacqueline? Sigo viva. ¿Estás decepcionada?".

Jacqueline apretó el puño y la miró fijamente. "¿Cómo sobreviviste?".

No era posible.

En esa situación, nadie podría escapar, pero esta mujer sobrevivió.

¿Alguien la salvó? ¿Quién pudo ser? ¿Quién la salvó cuando el fuego estaba a punto de tragársela entera?

Cuando Yvonne vio los ojos de Jacqueline, supo en qué estaba pensando y se burló. "¿Cómo he sobrevivido? Por supuesto, fue la bendición de Dios. Me salvó de la muerte".