Amor después del matrimonio romance Capítulo 709

"Presidente, admito que fue mi culpa, pero esa no es la razón por la que me está pidiendo que me vaya. Es injusto para mí. Además, la razón por la que vine aquí para la entrevista fue por el alto salario para poder devolverle el dinero". Mandy miraba a Henry con los ojos llorosos.

Henry lucio enojado. "¿Entonces quieres decir que no te vas a ir sin importar qué?".

"Sí, no me iré. Quiero quedarme". Mandy se enderezó de manera terca.

Henry resopló: "Bien. Si quieres quedarte, quédate entonces".

A Mandy le brillaron los ojos.

Sin embargo, antes de que se emocionara, Henry continuó: "Me gustaría ver cuánto tiempo vas a aguantar".

Después de decir eso, le pidió a Joe que los sacara.

Mandy se quedó sorprendida.

Después de que ella se fue, se dio cuenta de que Henry le haría la vida imposible para que ella se rindiera por su cuenta.

Pero, aun así, ella nunca se rendiría.

No fue fácil para ella comprar un diploma para poder solicitar el trabajo, así que, ¿cómo podría irse?

Mientras Mandy pensaba en esto, se animó en su interior.

Joe la miró profundamente y no dijo nada.

En ese momento, Elliot salió del ascensor mientras sostenía un archivo.

Cuando los vio fuera de la oficina del presidente, arqueó las cejas con sorpresa. "¿Qué están haciendo ustedes aquí?".

"Jefe, acabamos de salir de la oficina del presidente Lancaster", Joe se empujó las gafas y respondió.

Elliot tarareó para indicar que entendía. Luego miró a Mandy y al ver que sus ojos estaban llorosos, entrecerró los ojos. "¿Estabas llorando? ¿Alguien te intimidó?".

Mandy lo negó y no dijo nada.

Elliot miró a Joe.

Joe explicó lo que acababa de pasar en la oficina del presidente.

Después de que Elliot lo escuchó, sus sentimientos por Mandy desaparecieron un poco. "Resulta que fuiste tú quien manchó el vestido de Yvonne y arranco las flores de mi abuelo".

"No quise hacerlo", dijo Mandy a punto de llorar.

Ella realmente no lo hizo a propósito, pero ¿por qué todos pensaban que había hecho cosas terribles?

Elliot no soportaba ver llorar a las mujeres, así que hizo un gesto con la mano. "Está bien, todo está en el pasado. Si Henry quiere que pagues, así se hará. No hay problema".

"Lo sé, pero al presidente dijo que le gustaría ver cuánto tiempo duraría aquí. Él está tratando de ponerme las cosas difíciles. Presidente, ¿puede ayudarme? Por favor ayúdeme a persuadirlo y dígale que no se enoje conmigo. Solo quiero quedarme y trabajar para poder devolverle el dinero".

Mientras Mandy decía eso, agarró a Elliot por la manga y lo miró.

Cuando Elliot la vio así, no pudo evitar pensar en Yvonne de hace unos años.

En ese momento, Yvonne también suplicaba así.

Elliot apartó la mano de Mandy. "Está bien, lo entiendo. Te ayudaré".

"Está bien. Gracias, presidente". Mandy sonrió agradecida.

Elliot pasó junto a ella y entró a la oficina del presidente.

Joe le pidió a los otros cuatro ayudantes que se fueran y Mandy se quedó. Él dijo con en tono de advertencia: "Espero que te estés uniendo al Grupo Lancaster para devolver el dinero. Si es para otros fines, te aconsejo que te vayas lo antes posible".

Mandy se congeló por un instante y sus ojos brillaron. "No entiendo lo que quiere decir, Señor Woods".

"Solo tú sabes en tu corazón si estás fingiendo. No sería adecuado para mí decirlo, así que será mejor que lo averigües por tu cuenta".

Después de que Joe dijera eso, también se fue, dejando a Mandy sola con una expresión rígida.

Pasó un tiempo y la puerta de la oficina del presidente se abrió.

Elliot salió de la oficina.

Mandy lo saludó: "Jefe, ¿el presidente estuvo de acuerdo?".

Elliot la miró y agitó la cabeza.

Los ojos de Mandy se oscurecieron.

Elliot levantó la barbilla. "¿Por qué no te conviertes en mi asistente?".

"¿Eh? ¿Su asistente?". Mandy se quedó sorprendida.

Sue no tuvo más remedio que volver a la cocina para prepararle un plato de fideos.

"¿Escuché que no estabas trabajando en la empresa esta tarde?". Henry tomó a Theo de los brazos de Yvonne.

Elliot respondió: "Sí".

"¿También escuché que secuestraste a una de mis asistentes contigo y faltó al trabajo?". Henry lo miró.

Yvonne parpadeó. "¿Secuestré a una asistente? ¿Una asistente?".

Henry asintió y no hizo más comentarios.

Los ojos de Yvonne se iluminaron.

"Elliot, ¿te gusta?".

"¡Eso es imposible!". Elliot negó sin dudarlo. Curvó los labios y dijo: "Creo que es bastante interesante, y lo más importante, ella...".

Mientras él hablaba de esto, miró a Yvonne. Tenía una expresión compleja y dijo: "No es nada. De todos modos, ella no me gusta".

"Si no te gusta, no te metas con ella". Henry se molestó.

Elliot no lo escuchó y se encogió de hombros.

Yvonne preguntó con curiosidad: "¿Cómo se llama esa asistente y cómo es?".

"Está bien. La conoces". Elliot miró a Henry.

El hermoso rostro de Henry se oscureció de repente.

Yvonne arqueó las cejas, "¿La conozco? ¿Quién?".

"Es la que manchó tu vestido y arrancó las flores del abuelo. Su nombre es Mandy Lovett". Elliot fingió no ver la advertencia de Henry y le habló de Mandy con una sonrisa.

La expresión de Yvonne cambió. "¿Ella?".

"Sí, ella". Elliot asintió, "Ahora es la asistente de tu esposo".

Yvonne miró a Henry. "¿Por qué la contrataste?".

"Joe la contrató. Él no sabía nada de Mandy. Cuando me enteré, ella ya era asistente", Henry le explicó.