Devoción apasionada: la querida esposa del Maestro Fudd romance Capítulo 151

Verian dio un gran paso atrás y se mantuvo a una distancia segura de Yanni. “Presidente Quain, no bromee conmigo. No solo tengo novio, también tengo un hijo”.

A Yanni no le importó en absoluto y se rió entre dientes cínicamente. “Puedes romper con tu novio en el futuro. En cuanto al niño, es solo un producto de una subrogación. El niño no es el resultado del amor entre Heaton y tú”.

“¡Usted!”.

Las palabras de Yanni fueron provocativas, enojando a Verian hasta que ella lo miró con furia.

“Además, incluso si estás casada con Heaton, ¿y qué? En estos días, las parejas casadas se divorcian fácilmente. ¿Quién puede garantizar eso por el resto de nuestras vidas, quién será la pareja de quién o quién tendrá otra identidad?”.

Verian arrojó los documentos que tenía en la mano sobre su escritorio. “Presidente Quain, por favor revise el borrador. Todavía tengo trabajo por hacer. Regresaré primero”.

Haciendo caso omiso de las palabras de Yanni, Verian se apresuró a salir de la oficina.

Sin embargo, después de salir de la oficina, las palabras de Yanni resonaron en sus oídos como la voz de un diablo...

De hecho, Porotita Dulce no era el producto del afecto continuo entre ella y Heaton. Incluso si tenía esta relación biológica con ella, parecía una extraña que nunca había sido capaz de encajar en la vida de la familia Fudd.

¿Podrían ella y Heaton realmente permanecer juntos?

Además, Verian siempre tuvo una pregunta en su corazón. En ese momento, accedió a subrogarse por los 10 millones de dólares. Sin embargo, ¿por qué Heaton buscó a una extraña para la subrogación? ¿Quería simplemente tener un hijo?

...

Después de que Verian salió del trabajo, Heaton llamó.

“¿Ya has terminado?”.

Verian respondió mientras hacía sus maletas, “Acabo de salir del trabajo. Me dirijo hacia abajo pronto”.

“Estoy en la puerta principal de Yash”.

Verian se sorprendió. Sostuvo su teléfono con una mano y tomó su bolso con la otra. Salió rápidamente de la oficina. “¿Estás aquí sólo para recogerme?”.

El hombre solo pronunció cuatro palabras. “Estás en el camino”.

Ella no pudo escuchar ningún signo de preocupación y dulzura en su voz predominantemente fría. Sin embargo, Verian se sintió halagada.

...

Al salir del edificio Yash, vio un Maybach negro en la distancia.

La lesión de Heaton en su brazo derecho no debe haberse curado completamente todavía, por lo que dejó que Kush condujera en su lugar.

Después de que Verian subió al auto, Kush miró a las dos personas en el asiento trasero desde el espejo retrovisor. Sonrió y deliberadamente le dijo a Verian: “Sra. Monty, he esperado media hora abajo en el edificio Yash”.

Verian estaba atónita. Levantó los ojos ligeramente para mirar al hombre aparentemente tranquilo y vacío sentado a su lado.

Heaton frunció el ceño levemente y sus ojos fríos miraron a Kush que conducía el auto en el asiento delantero. “¡Conduce el coche correctamente!”.

“Sí jefe”.

Por lo tanto, alguien que acaba de decir por teléfono que pasó a recogerla porque estaba de camino a su ubicación fue una mentira.

¿Quién pasaría y esperaría media hora?

Verian se inclinó, tomó la iniciativa de estirar la mano y sujetó su brazo. Apoyó la cabeza en el hombro del hombre y preguntó deliberadamente: “¿Viniste especialmente a recogerme después del trabajo?”.

Heaton frunció sus delgados labios y la miró con arrogancia. Luego, dijo: “De lo contrario, ¿crees que estoy tan aburrido para esperarte media hora?”.

Aunque su tono era frío, el corazón de Verian se sentía dulce y alegre. Ella apretó su brazo con más fuerza.

“Si sigues sosteniendo mi brazo lesionado con tanta fuerza, pareciera que quisieras que se mantenga herido.

La repentina burla del hombre sorprendió a Verian. Ella justo recordó que su brazo aún no estaba completamente curado, así que rápidamente lo soltó.

“Olvidé que tu brazo aún no está curado”.

Heaton se burló de ella cuando dijo: “Me temo que alguien luchará por eso contigo. Solo abrázame así, pero relájate un poco”.

El rostro de Verian se sonrojó.

...

“Porotita Dulce ha llegado tarde a la escuela recientemente. Si nos mudamos a un lugar más cercano al jardín de infancia, Porotita Dulce puede dormir más tiempo. Además, me facilitará ir al trabajo”.

Heaton dio una razón válida a la que John sabía que no podía oponerse. John se levantó y soltó un bufido frío. No hizo ningún comentario y se dirigió a su estudio.

Cuando el anciano llegó a la puerta del estudio, se dio la vuelta levemente con su bastón y dijo: “No me importa si te mudas, pero Porotita Dulce debe volver a casa todos los sábados y domingos”.

Al decir esto, el anciano entró al estudio.

Verian no esperaba que el anciano estuviera de acuerdo con su decisión de mudarse tan fácilmente.

“¿Por qué de repente pensaste en mudarte?”.

“¿No estás feliz?”.

¿Por qué estaría molesta? Después de todo, se sentía más feliz, ya que no quería vivir bajo el mismo techo con Nancy en primer lugar. También tenía miedo de tener que llevarse bien con Don Fudd. Mudarse con Heaton y Porotita Dulce sería realmente bueno. Era equivalente a vivir una vida independiente en familia de tres. ¿Cómo podía estar infeliz?

“Por supuesto que estoy feliz, pero tengo miedo de que Porotita Dulce extrañe al abuelo”.

“Si extraña al anciano, después de la escuela, puedo enviarla a la casa Fudd para una visita”.

Cuando terminó de hablar, sonó su teléfono celular.

Vio el identificador de llamadas y no respondió. Verian se inclinó hacia él y preguntó: “¿De quién es el número?”.

Dio la vuelta al teléfono para que Verian no viera el identificador de llamadas. Simplemente susurró: “Es alguien del trabajo”.

Verian no se sintió sospechosa en absoluto. Después de que Verian subió las escaleras, Heaton rápidamente devolvió la llamada.

Lain Heidy, que estaba hablando por teléfono, preguntó, “¿Por qué no contestaste el teléfono hace un rato?”.

Frunciendo los labios, preguntó, “¿Qué pasa?”.

“Solo te llamé para recordarte que el medicamento que te receté la última vez se terminará en unos días. ¿Crees que puedes pasar por mi casa a buscarlo estos dos días?”.

“Está bien, puedo hacerlo”.