Diario de una Esposa Traicionada romance Capítulo 708

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Creció en una familia tan estricta, siendo hijo único, con una responsabilidad enorme sobre sus hombros. El camino para cultivar su carácter estuvo lleno de dificultades. Desde pequeño tenía claro lo que quería, lo que moldeó su personalidad en una calma fría.

En aquellos tiempos, incluso la forma en que expresaba sus sentimientos era serena y reservada. Pero antes de que pudiéramos darnos cuenta, su abuelo la había enviado al extranjero. Decían que era para su formación, para que aprendiera algo más. Pero la verdad era que querían separarla de Ander.

Después de años sin verse, y a medida que crecía, todo cambiaba. Sin embargo, cuando volvió al país y fue al hospital a verlo, la actitud de él hacia ella era la misma de siempre. Aunque distante, tenía una suavidad única. Ella pensaba que ni siquiera la intervención de su abuelo importaba.

Cuando era más joven, no tenía control total sobre su vida. Ahora que había crecido, estaba comenzando a tomar las riendas de la familia Elizondo. Con el poder en sus manos, nadie podría impedirle estar con ella.

Sabía que había una tal Leticia que siempre lo perseguía y se acercaba a él; incluso habían tenido algo por un tiempo. Pero estaba segura de que Ander solo la tenía a ella en su corazón.

Pero lo que veía ahora le daba una profunda sensación de crisis. Tal vez... Ander realmente había comenzado a gustarle Leticia... No, quizás ya estaba llegando al amor.

No podía seguir manteniendo su usual gentileza, esperando lentamente a Ander. Tenía que encontrar una manera de detener el avance de su relación.

"El guardaespaldas te llevará de regreso."

Ander le lanzó esas palabras antes de subirse al auto y marcharse. El guardaespaldas soltó a Enzo y se acercó para que Laura subiera al vehículo.

Pero Laura detuvo a Enzo, quien iba a irse. Su voz siempre era suave y gentil, sin agresividad, lo que hacía difícil enojarse con ella.

"Puedo ver que Leticia realmente le gusta a Ander, y quiero que Ander sea feliz. Por eso, te aconsejo que te rindas pronto. Si sigues insistiendo, la familia Elizondo no es de las que se quedan de brazos cruzados. No podrás enfrentarte a ellos."

Enzo, a pesar de ser joven, no era una flor de invernadero. Ander estaba demasiado involucrado para ver las cosas claramente, pero él, como observador, lo veía todo perfectamente.

"¿Así que esperas que tu Ander sea feliz?" Enzo respondió con sarcasmo, "Has fingido tanto tiempo que ya te lo crees, ¿verdad?"

El guardaespaldas de Ander todavía estaba allí, por lo que Laura no podía decir mucho. Pero ya tenía un plan en mente, y estaba segura de que, si se lo decía a Enzo, él estaría de acuerdo.