Divorciada: Su Revolución Científica romance Capítulo 1129

—De acuerdo, organizaré de inmediato a mi equipo para que se ponga a investigar —respondió Gaspar, asintiendo.

—Micaela es una investigadora especializada en interfaces cerebro-máquina —señaló Ismael.

De repente, Norberto recordó algo: el último mensaje de su hijo antes de partir. «Papá, Micaela y yo hemos empezado a salir oficialmente. Es una chica estupenda, espero tener tu bendición».

Norberto volvió en sí y, tras un momento de grave reflexión, dijo:

—Micaela y Anselmo confirmaron su relación hace dos semanas. Si se entera de la situación de Anselmo, sus emociones se verán gravemente afectadas. —Hizo una pausa y continuó—: Gaspar, tengo que pedirte un favor. Para no afectar la investigación de Micaela, espero que, por ahora, le ocultemos la verdad.

Gaspar frunció ligeramente el ceño.

—¿Qué quiere decir?

—Le diré que Anselmo está en una misión secreta y que tardará un tiempo en poder comunicarse. Cuando la investigación de la interfaz cerebro-máquina haya avanzado, la iremos preparando poco a poco para que acepte la realidad.

Gaspar guardó silencio por un momento. Comprendía las preocupaciones de Norberto, pero la idea de engañar a Micaela le causaba un conflicto interno.

—Entiendo su difícil situación —dijo finalmente Gaspar—. Pero Micaela tiene derecho a saber la verdad.

—Sé que no es justo para ella —dijo Norberto, levantando sus ojos enrojecidos por la falta de sueño—. Pero dada la condición actual de Anselmo, no puedo permitirme perder ninguna posibilidad de despertarlo. Micaela es clave en la investigación de la interfaz cerebro-máquina, y su estado de ánimo afecta directamente las posibilidades de que Anselmo despierte.

A su lado, el rector Ismael estuvo de acuerdo.

—El estado emocional de un investigador es crucial. Necesita mantenerse racional y lúcida.

Gaspar miró a Anselmo, inerte en la cama, y libró una intensa batalla interna. Finalmente, respiró hondo.

—De acuerdo, guardaré el secreto.

—Gracias, Gaspar. Si necesitas cualquier cosa, no dudes en pedírmelo —dijo Norberto, estrechándole la mano—. En cuanto la investigación logre un avance, por favor, avísame de inmediato.

—Movilizaré todos los recursos médicos del país para apoyar su investigación —declaró Ismael con solemnidad.